El Imperio de Xanarian. Capt.5

ANKALAGORN


Estaban jodidos.
La alarma estaba dada y 400 hombres empezaban a arremolinarse en el patio, esperandolos. No habria escapatoria... a no ser que...
Ankalagorn miro directamente al General, que esperaba tras sus lineas, para entrar en combate, pero sus hombres fueron cayendo uno a uno como fruta madura. Marco Labro vio en el los ojos de un demonio y por primera vez en mucho tiempo sintio el verdadero terror:
-Tenemos que coger al General! es nuestra unica moneda de cambio para salir de aqui.
Sabia perfectamente que sus amigos ya habian pensado lo mismo que el.

El vino de la cena comenzaba a subir y las bromas distendidas se sucedian:
-Cras! Amigo- Dijo Ankalagorn- Creo que debes saber que eres un ser afortunado!
-Ah si?-Pregunto intrigado el General- Por que lo dices?
-Porque si tu nombre hubiera sido Pijus o Pompus o Maricus y tu enemigo se llamase, por ejemplo Aragorn, el puto Calvo nos habria hecho del otro bando! JAJAJA!-Las risas sonaron al unisono.

La celebracion continuo, hasta que aparecio el tema de los dragones. Intrigado el General preguntaba por esos seres mitologicos, pero sus nuevos mercenarios seguian bromeando... si de verdad Cras supiera la mitad de lo que habian visto esos hombres, sin duda habria perdido la cordura... como ellos. Por ejemplo, habian visto tantos hombres llegar a su fin que ni la muerte de uno de los suyos, Bregolas, el Alto, habia afectado lo mas minimo sus animos, sin duda no eran humanos, talvez eran demonios, pero como se decia en Xanarian, habia que tener aliados hasta en los Abismos de la sexta profundidad.

-Un dragon arranco el hombro de un mordisco a nuestro amigo Groomch... y luego ...lo resucitamos! JAJAJA.

Era dificil mantener una conversacion seria en ese estado, pero de repente las palabras surgieron de la boca de los mercenarios al escuchar las 2 palabras de Cras:
-Estoy buscando un Dragon negro.
-A mi me llemaban el Dragon Negro, ya sabes, esos apodos que se ponen los niños- Dijo Ankalagorn-De hecho, es lo que significa Ancalagon alla de donde vengo.
- No puede ser! JAJAJA- AHora rio a carcajadas Cras, al darse cuenta que todo encajaba. Les explico que un oraculo de una tierra llamada Helena, le habia dicho que debia encontrar al Dragon Negro y que el le daria la victoria y casualmente ese Dragon era el mismo Señor de las Huestes.Ahora tendrian que hacer la ultima mision para Cras y ya que habian llegado hasta ahi...por que no terminar.
-Ese oraculo podria ayudaros a vosotros tambien-Dijo el General- pero antes haced por mi un ultimo favor.
-Usted ordena- Respondio el Dragon Negro-General.


Debian internarse en un laberinto y encontrar dentro de el, una especie de estandarte simbolico... pero de verdad era tan importante un estanadarte, sin ninguna propiedad magica? para esta gente parecia que si y muchas veces se habia demostrado que la fe, era mas poderosa que cualquier magia.Por fin volvian a una mision mas propia de las aventuras delirantes de su mundo que del que estaban.

Tras un fugaz paso por la capital de Xanarian, donde disfrutaron de un buen servicio, continuaron por el camino que cruzaba de norte a sur el pais.Ankalagorn ylos demas intentaron aprender de las costumbres de esta gente, pero el tiempo no se lo permitia y no muchas cosas llegaron a comprender. Hubo, si una, que llamo la atencion, sobre todo a Kang y a Ankalagorn, fue la de adoptar a los dioses de las demas culturas como suyos propios, incluso levantando altares a dioses desconocidos por ellos, para rezarles sus creyentes. Podria en uno de esos altares comunicarse con Abigor? de alguna manera el Demonio podia estar intentando comunicarse con ellos y ayudarlos, ya que habia un hecho evidente...el Kuma, una flor que aparecio no hacia mucho en las vidas de los ciudadanos de Elder, y que sorprendentemente, un dia, años atras, alguien le puso el sobrenombre de Flor de Abigor. Realmente era algo enimagtico.

"¿Es que no sabes leer?", le espetó su amigo y compañero "Es el viejo refrán, más vale una cabeza que dos brazos. Mejor usar la maña, la inteligencia. Vamos que no se te ocurra usar la fuerza y entrar a espadazo limpio. Solo es una advertencia"
Ninguno de los cinco amigos y compañeros de armas se había bajado del caballo. "En tu caso no dejes de usar los brazos, porque la cabeza te sirve de bien poco, Marco. No te das cuenta, es más que una advertencia, se trata de una clave, tal vez para evitar un peligro, o para indicar el camino hasta la puerta" Tricinio respetaba a Marco en cuestión de lucha, pero como cabeza pensante dejaba mucho que desear, era espabilado; pero a veces se embotaba y decidía defender una postura, aunque le hubieran demostrado que no estaba del todo en lo cierto. Por éso, Tricinio era Jefe de Manípulo y Marco no.
"Lo importante son los número. Ambos están subrayados. El uno de la cabeza y el dos de los brazos, puede que ésa sea la solución" Sempronio Sergio hablaba muy poco, por eso cuando se dignaba a hacerlo Tricinio lo escuchaba, aunque como ahora, puede que también se equivocara, pero no se lo iba a decir al legionario. Sempronio Sergio formaba parte de los "princeps" los legionarios de élite reservados para el final de combate; mientras que Tricinio, aunque Jefe de Manípulo, seguía siendo un "vélitex" de segunda línea de batalla.
"No es tan difícil. Nos alzaremos a pie a la grupa del caballo para poder ver por encima de los setos venenosos. Así sabremos qué camino tomar" el que hablaba era Aerux, un buen hombre con el que compartir una noche en una taberna, pero un autentico imbécil. A veces Tricinio pensaba que hablaba sin pararse a pensar antes en lo que iba a decir, y éso solía traerles problemas. Presumía de haber estado en todas las ciudades del imperio, pero hasta hace unos días, no había puesto un pié en Xanarium, la capital. Ahora su arrogancia sería insoportable.
"Conforme, y cuando te caigas del caballo y te rompas el cuello, o te abraces a uno de ésos setos venenosos, no esperes que yo vaya en tu ayuda, animal" le había contestado el quinto del grupo y con quien mejores migas hacía Aerux, un legionario llamado Cayo Graco. Sabía tener la boca cerrada. Hablar solo cuando convenía y hacer lo que le ordenasen sin hacer preguntas. "Además, dicen que nadie que entra sale. Te has parado a pensar que las indicaciones podrían ser trampas mortales". Éso ni Tricinio lo había pensado. Pero no. Sería una broma macabra de mal gusto. ¿Qué clase de dios o mente pensante haría que lo que a primera vista parecen pistas, fueran trampas? Sería demasiado cruel. Pero la vida era cruel, y nada era lo que parecía.
Aún estaba en ésos pensamientos cuando la voz lo devolvió a la realidad.
"Vosotros habéis venido a guiar por el camino y a cuidar de los caballos. Ya nos encargaremos nosotros de pensar y esquivar trampas". La voz provenía de ese mastodonte calvo. No se había presentado, tampoco los soldados. Pero durante el viaje habían aprendido los nombres de todos. Sabía que el que hablaba era Kang, aunque a veces también lo llamaban "calvo" o "manos de troll". Desde luego, si los trolls existían, deberían tener unas manos como aquellas. Tricinio era lo bastante listo para saber que provocar a aquellos mercenarios era buscarse una muerte segura. No los había visto pelear, pero había oído lo que habían hecho, y había visto los resultados.
Ante el repentino ataque de vanidad que le sintió por dentro, tuvo que contenerse recordándose así mismo, que era un soldado y obedecía órdenes. Guiar y cuidar caballos, una misión de niñeras pero era su misión.
"Así es. Solo tratábamos de ayudar, señores" contestó.
"Tanta palabrería e ideas estúpidas, no nos ayudan. Nos distraen y desconcentran. Guardad silencio hasta que nos hayamos marchado". Quien contestó era aquel al que llamaban "Señor de las Huestes" su líder y el que parecía más frío y peligroso de todos.
A Tricinio no le quedó más remedio que tragarse la lengua y hacer un gesto para que el resto se callara.
"¡Pues vaya!" se le ocurrió soltar a Aerux. El muy imbécil, siempre con la boca más grande que el sentido común. Pero la respuesta no pareció incomodar a los mercenarios. Los salvadores de Xanarian como los llamaban algunos en el campamento.




OFF:(Texto pequeño arriba del cartel) Más vales una cabeza que DOS brazos.
(Texto de abajo en mayúsculas)

VI DEDO A VILESA
DE RESTRIO EL ACER HAMA.

Lo que sí os pueden decir los soldados es que el texto de abajo no es Xanariaum, vamos que no tienen ni idea de lo que dice.

Resumen:

Un hombre aparecio en la noche mientras debatian una posible solucion al acertijo.
Este les propone acompañarlo hasta un campamento de Cras,al que les hara entrega de su cargamento que lleva en su carro: Agua; ya que parece ser que el agua del campamento ha sido envenenada por los hombres de Pompus y ha llevado a caer enfermos a muchos hombres.
Los aventureros aceptan. Despues de todo, el laberinto no se va a mover y les vendria bien despejar la mente.
Durante el trayecto descubren que Hecterium, que asi se llama, ha perdido toda su escolta durante el viaje, atacados por hombres de Pompus...o al menos eso cree, ya que el escapo.
Para ahorrar viaje y convertilo en media jornada de ida y otra de vuelta,Heterium les propone hacer el viaje por el Bosque del Silencio, un lugubre lugar donde la gente dice que habitan las sombras y almas malditas. Segun la leyenda, el bosque debe ser atravesado en silencio, para no atraer la atencion de estos seres del inframundo.
Todo transcurre en silencio, tanto que ningun animal se escucha en el lugar, pero todo se rompe cuando los hombres de Pompus que siguen a Hecterium, entran en escena:
-Por aqui!- Grito uno de los hombres de Pompus- He escuchado a alguien por aqui!
El silencio se volvio ruido y los hombres de Pompus avanzaron entre la espesura de matorrales y neblinas, mientras los aventureros esperaron en el claro del camino, aprovechar la ventaja de una emboscada. De repente todo se volvio silencio otra vez.
Un golpe sordo volvio a romper ese silencio tenso, seguido de un chasquido de huesos rotos, consiguio adivinar Harol, seguido de gritos de dolor.
Varios golpes siguieron a ese primer sonido y gritos de dolor y muerte, lamentos de moribundos que se arrastraban, hasta que se apagaban tras un nuevo demoledor golpe. Algo estaba masacrando a los hombres de Pompus como si fueran alimañas invasoras del bosque.

Tras la sangria Ragnarok, Kang y Harol se acercan al lugar de los hechos, pero no consiguen encontrar ningun cadaver. Ademas no hay demasiadas huellas de sangre, pero el olor de esta es muy pronunciado, como descubre Kang. Averiguan que una criatura ha atacado al grupo de unos 6 hombres, al ver una garra en el suelo. Debe medir mas de 2 metros y medio y no hay huellas suyas de llegada ni de huida. Al buscar huellas en los arboles, tampoco hallan gran cosa... COmo habra llegado esa bestia al lugar y como se habra marchado con 6 cadaveres?
De repente 6 hombres de Pompus salen de la espesura buscando a sus camaradas y se encuentran de cara con Kang, Ragnarok y Harol, sin mediar palabras los atacan.
Los 3 heroes huyen hasta el claro donde estan sus amigos, para equilibrar las fuerzas. Un mercenario acorazado y con una enorme maza , mide sus fuerzas con Harold, mientras los nativos de Pompus luchan contra los demas. Harold es herido y solo Uno lo salva ante la dureza del mercenario, pero al final vence.

Hecterium sigue un mapa que le ha vendido un hombre, pero se encuentran perdido. Ragnarok decide investigar el mapa pero tampco entiende mucho de este. Las indicaciones son algo imprecisas. La noche se les hecha encima y tienen que pasarla en el oscuro y lugubre lugar.
Durante la noche en la guardia de Harol y Haral, escuchan sonidos de lamentos y ven figuras extrañas, pero no son atcados, aun asi la noche es dura ya que no consiguen descansar mucho. Hecterium asustado, dice que son las sombras y las almas malditas.

Al dia siguiente continuan andando por un rumbo secundario, el carro se atranca en un barrizal y todos empujan para sacarlo. A unos 20 metros Ragnarok observa una silueta alta y oscura, que se desvanece entre rafagas de neblina.
Continuan avanzando, cuando de repente y por sorpresa mayuscula, una figura negra esta posada en lo alto del deposito de agua del carro. Esta se lanza contra Harol y lo levanta del caballo arrojandolo contra el suelo, afortunadamente para el la altura tomada no es mucha y no se hace demasiado daño.
La forma que ven es la de un murcialago gigante-humano, de mas de 2 metros y medio, que sobrevuela sus cabezas. Los caballos asutados huyen y no obeden las ordenes de sus dueños; solo Ragnarock consigue controlar el suyo. La bestia cae sobre Harol nuevamente, pero huye de esta, los demas bajan de los caballos y van a defender a Harol, todos excepto Ragnarok que consigue mantenerse sobre su montura. La bestia se mueve muy rapida y alcanza a Harol; Ragnarok alcanza a la bestia antes y lo golpean, pero observan que es como golpear un saco de tierra con un palo, la criatura ni los siente y golpea a Ragnarok con contundencia, bajandolo del caballo y solo Uno, los salva de una muerte segura.
Seguidamente atacan Kang , Ragnarok y Ankalagorn, pero de nuevo es como golpear a un saco de tierra. La criatura vuelve a golpear a Ranga que vuela varios metros. Afortunadamente para el, su armadura le salva la vida.
Ankalagorn descubre que es un Vampiro , por lo que deducen que solo la plata o los elementos fisicos asustarian a la criatura. Harol manda encender fuego a Hecterium, mientras es perseguido por la bestia. Los aventureros deciden apartarse de ella, pues no son rivales.
A Harol se le ocurre una brillante idea absurda...de donde sacar plata? Harol piensa que las monedas pueden servirles si se las colocan entre los dedos, como si fuera un guantelete de plata, y golpear con puñetazos a la bestia.

Ragnarok y Ankalagorn golpearon con contundencia a la bestia. Un puñetazo al estomago de Ragnarok hizo que se doblara por el dolor, por fin, pero Ragnarock no contaba con la velocidad del vampiro, que a la vez cargo el puño contra su cabeza. Ragnarock volvio a volar varios metros a la izquierda de la criatura y cayo inconsciente. El vampiro al sentir el dolor se sintio, a la vez, vulnerable, por lo que decidio huir.
Por que arriesgar su inmortalidad, cuando puede alimentarse de incautos humanos que viajan por el bosque de siglo en siglo?

Resumen:

había que coger la primera letra y quitar las dos siguientes. De ésta manera salía un mensaje muy clarito, VE A LA DERECHA. De ésa forma llegasteis a la entrada del templo. Por el camino visteis huellas de un felino grande. En la puerta otro acertijo. "Un matrimonio con su hijo de Sanif venían. Y por el camino se encontraron con un hombre con siete mujeres, cada mujer tenía siete gatos y cada saco siete gatitos. ¿Cuántos a Sanif iban?" al lado una ruleta con los números I, II, III, V, X, L, C, D y M. Y un espacio en blanco. El acertijo salía en Jungla de Cristal 3, la respuesta es cero. Y efectivamente la puerta se abrio. Dentro siete puertas con los números romanos del I al VII, y en medio un circulo con un símbolo que no puedo dibujar por aquí, al lado un agujero, por cierto, el dibujo estaba hecho con canalización interior. En la entrada escrito en Audaico, si, si, en Adunaico, pone "Sala del sacrificio" así que decidis volvar sangre por el agujero para que el dibujo muestre la puerta correcta. Vais a volver a matar al leon, pero esta ya os estaba acechando, y entonces el desastre, UN HIJO DE MIL MADRES Y UN TROLL (si no cómo va a tener ésas manos) disparó una flecha y traspasó a mi leoncito Lannister junto con su corazón y se lo cargó.( llorando
Bueno, al final era la puerta V. Entrais, y llegais a una sala alargada, el cartelito en adunaico pone "Sala de la humildad", El mismo Hij..... que mató a mi leon dice que habrá que pasar de rodillas, y efectivamente, si pasas de pie unas hojas y lanzas que salen por la pared te rebanarían la cabeza. (esto es de indiana Jones y la última cruzada) aqui Anka se da cuenta que el templo es antiquísimo, puesto que los pasillos, el suelo es de arena inmaculada y perfecta, y cada sala está llena de polvo, suelo incluido, por lo que dejais huellas perfectas y exactas de todo lo que haceis y pasais. Después llegais a otra sala, en el centro una piscina descendente, un atril con unos números romanos del I al XXIV, el cartel es un libro tallado en piedra que en una hoja pone "Ten cuidado con lo que inicias o te ahogarás" en la otra hoja pone "Solo el Dragón Negro pasará". Aquí Fresón del Norte dedujo que habría que poner el nombre de Ancalagon sustituyendo las letras por su equivalente numérico en xanario. Ancalagon es el nombre real del dragón. Efectimante, al tocar la primera piedra las puertas se cierran y empieza a salir agua de la piscina, pero al terminar la puerta se abre y en la siguiente sala un altar con el estandarte.
De camino de vuelta os atacan 20 hombres de Pompus que son los mismos que os tropezasteis al salir de la capital Xanarium y que ambos os dejasteis tranquilos. El plan era dejar que cogierais el estandarte y después robarlo. Así vosotros hacias y el trabajo sucio.

Los Salvadores de Xanariam. El nombre implicaba mucha responsabilidad; pero éste no era un momento de malos pensamientos que pudieran nublar la euforia y felicidad desatada.
El Dragón Negro, Señor de las Huestes, volvía con sus hombres y tres de los soldados con los que había empezado la campaña. Aerux y Cayo Graco habían caido por el camino, en una emboscada de los hombres de Pompus para hacerse con el estandarte.
El estandarte, pensaba Ankalagorn, tanta revuelta por un trozode trapo colgada de un águila de oro. Todo el campamento estaba tan histérico como si acabaran de ganar la guerra, como si en lugar de ésa estúpida águila dorada trajeran la mismísima cabeza de Pompus.
En todo el campamento solo un rostro parecía sombrío. Cayo Glelio. "No tiene cara de buenos amigos" el comentario del Calvo había sido escueto, como casi todas sus palabras, pero Anka sabía a quien se refería. "Tal vez no le guste esta manera de entrar nuestra" el Calvo se refería a la idea del propio Ankalagorn. Ya que estaban haciendo todo el trabajo sucio era hora de tener un detalle con sus hombres. Iban en una columna de dos; en la cabeza el numenoreano junto a Kang, justo detrás de ellos Sempronio Sergio con el estandarte, seguido de Ragnarok y Harol Freenzen; detrás Haral Freenzen y Tricinio, y cerrando la marcha Marco. Parecía que el General en Jefe allí fuera Ankalagorn y Kang su lugarteniente. Eso es lo que podría haber disgustado a Glelio, pero una vez desmontados de sus caballos y tras los saludos de rigor, se vio que la preocupación era otra.
Glelio sabía que la guerra aún no estaba ganada, y el propio Cras parecía rendir pleitesía a los mercenarios. Abrazó a Ankalagorn como si fuera un hermano y lo hizo delante de todo el campamento. Instaló el Estandarte Sagrado denlante de su tiena y nombro otros doce liptores para que lo defendieran. Entre ésos liptores se encontraban Sempronio Sergio, Tricinio y Marco. Después hizo pasar a sus hombres de élite a su tienda.

"La verdad es que no tengo palabras para describir vuestra audacia. La verdad ¿qué puedo decir?" comento el xanario. "Haceis bien en alegraos. La moral es algo importante, pero sin batallas no se puede ganar una guerra" fue el comentario del Señor de las Huestes.
Cras se volvió con una sonrisa dibujada en la cara a Glelio. "Sin duda sois señor de huestes y un líder innato. Efectivamente, la guerra no está ganada; pero he de mantener la moral lo más alta posible. Y ahora no hay nada que la pueda aumentar más. Pero en una cosa te equivocas, sí se pueden ganar guerras sin batallas, pero por desgracia ésta no es una de ésas veces"
"Luego habrá batallas que librar" las palabras del Calvo sonaban con ansiedad, como las de aquel que hace de la guerra su vida.
"No" fue la respuesta rápida de Cras "Habrá una sola batalla. La Batalla" Hubo un silencio largo tomado de diferente manera. Había quien como los veteranos lo comprendia a la perfección, mientras que los primos esperaban con inquietud una respuesta más clara, que no tardó en llegar.
"He ordenado unir todas mis legiones y marchar contra Pompus. Pero parece que éste se ha adelantado y se dirige contra nosotros." comento el general. "Un hombre astuto" respondio Kang "Así es, cuenta con un número mayor de fuerzas, pero nosotros le superamos en moral. Además para mantenerla alta, mañana a primera hora marcharemos contra ellos. Lo haremos de forma tranquila, no quiero cansar a las tropas. Pompus viene hacia aquí a marchas forzadas, eso también estará de nuestra parte. El oráculo no se ha equivocado hasta ahora. Espero que siga en lo cierto en lo referente a vosotros porque os nombrare imperatus de las legiones que elijais, si así lo deseais".

Off Roll.- No hay tiempo para arreglar armaduras ni nada, pero da igual porque esto va a ser una batalla. Os informo la forma de pelear básica de los Xanarianos (Romanos, por si quereis comprobarlo en Wikipedia), en primera fila están los hastatii, gente con lanzas enormes y escasa armadura. Tras ellos están los vélitex, su primer ataque suele ser con pilum y despues gladio. Por último están los princeps, estos son guerreros de la hostia. Lo de combatir en fila y que cuando suena un silvato se releban por el solado de atrás solo lo hancen los vélitex y princeps. Estas filas se ponen en el centro, a los flancos (ambos flancos) se suele poner caballería para destruir a la enemiga y rodear las tropas del enemigo y acabar con ellas. Todo esta es la forma básica y clásica de batalla pero puede variar (los grandes lo hacían para desconcertar al enemigo o superar sus fuerzas) Cras espera recibir refuerzos pero no sabe si llegarn a tiempo o demasiado tarde. Cualqueir duda o aclaración hacerla antes del lunes, ya os iré dando más información de cómo será la cosa. Como siempre os mando fotos.

La batalla por Xanarian


POMPUS


El día amanecía limpio. El aire era fresco y el sol brillaba con fuerza. Era un día magnífico para una gesta memorable. Todo iba a salir bien, pero en su carzón había un atisbo de tristeza; pues, quien antaño fuera su amigo, Cayo Jéris Cras, se enfrentaba a él. Pero lo importane era el imperio Xanariano, debía dejar a un lado sus afectos personales.
Hoy lucharía contra el rebelde y traería la paz al pueblo. Aunque el enemigo contaba con un arma poderosa, un estandarte antigüo que aumentaba la moral de tropa notablemente. Lo cierto es que no era la única noticia poco alagüeña ésa mañana. Al parecer, Cras, había acampado un par de días antes más al sur; por lo que el campo de batalla lo había decidido él. Para colmo de males también estaban formados antes de su llegada.
Pero no se amilanó, él era Sempur Sorus Pompus, de la casa de los Sorus, y no pensaba amilanarse. Cras siempre había sido un estratega más torpe que él. De hecho, en una maniobra magnifica, Sorus Pompus había conseguido movilizar más trompas que Cras en menos tiempo. Cras contaba solo con diez legiones, pero él contaba con catorce.
De todas formas, la distribución del lugar era buena. Su ahora enemigo Cras, se había dispuesto en lo alto de una cima bastante pronunciada. Pero habían cometido un error, estaban demasiado juntos. A primera vista, éso daba un efecto ótpico de mayor número de fuerzas, pero les daría menor movilidad. Había tan poco espacio que incluso tuvieron que colocar una de sus legiones a las faldas de la motaña, en su flaco derecho. En el flanco izquierdo había una explanada que terminaba en un bosque.
Pompus contaba con toda una planicie, y solo un rio que mermaría su movilidad en el flanco derecho. Pero el rio no era problema, podría disponer sus tropas sin que éste lo estorbase.
El corporte Sorus Pompus empezó con las órdenes. Él no entraría en contienda, su número era mayor y creía haber dado con la clave para aniquilarlos, no se arriesgaría a morir en combate por un pilum perdido o la lanza de un idiota desesperado que echara a perder todos sus planes y el futuro de Xanariam. Ya había pasado otras veces.
"Centuriones, escuchadme. La batalla será sangrienta pero fácil. Dividiré mis fuerzas en dos, la I, II y III legión de Hastatii irá en cabeza para atacarlos de frente. Les seguiran la VII y VIII de vélitex, y la IX y X de Triarí, la XI de princeps. Por su flanco izquierdo mandermos a la IV de Hastatii, la V de Vélitex, la VI de Triari y la XII y XIII de Equites. El primer grueso atacará y mantendrá a raya la vanguardia de sus tropas. Las que ataquen por el flanco acabarán con ellos enseguida. Las dos legiones de Equites lucharán en la zona más alejada. Salvarán ésa distancia gracias a sus monturas y podrán acabar con su legión de Triarii y proseguir hasta la cima de la montaña. Una vez allí, bajarán y atacarán por detrás. Así serán aniquilados."

Las tropas se desplegaron. La idea de Pompus parecía que tendría su efecto. Las tropas de Cras estaban rodeadas en la cima de la colina. Aunque la posición les daba algo de ventaja a los Crasianos. Todo parecía hacerse según lo planeado por Pompus. El combate empezó en el flanco derecho Pompusiano o izquierdo Crasiano. Los primeros en empezar a sangrar fueron dos legiones Hastatii, la II Crasiana contra la IV Pompusiana. Todo acabó muy rápido. Los Hastatii Crasiano exterminaron a los Pompusianos sin apenas tener bajas, fue un ataque doble demoledor por parte de las fuerzas de Cras por un ataque torpe y mal colocado por las tropas de Pompus. Los siguientes fueron los Vélites Pompusianos contra los Triari Crasianos. Aquí la batalla estaba igualada, de hecho, parecía que las tropas Crasianas aguantaran esperando algo. Cuando en la parte más alejada del campo de batalla entraban en liza los Equites Pompusianos, su XII legión de Equites se disponía a pasar por encima de la VIII legión de Triarii Crasiana. Los Equites avanzaban en carga, pero las tropas Crasianas aguantaban en formación de tortuga. La embestida fue ensordecedora; el sonido del acero llegaba hasta el otro extremo de la planicie, en la que Pompus, sus liptores y unos cuantos seguidores más contemplaban el espectáculo. Pero algo no iba bien, los Equites no asomaban por el otro lado de la montaña. Por el contrario unos gritos de angustia, emitidos por miles de caballos, apagaban los sonidos del acero al entrechocar. Los Equites estaban siendo aniquilados. El general Xanariano comenzó a ponerse nervioso. La batalla acaba de comenzar, sus tropas estaban colocadas perfectamente; la pinza estaba colocada; solo faltaba cerrarla. Pero en lugar de éso, acababa de perder una legión de Hastatii y la primera de caballería parecía perdida.
Comenzaba otra fase de la batalla. Pompus empezaba a comprender que había subestimado la colocación estratégica de las tropas de Cras. Pero ahora, sus tres primeras legiones de Hastatii entrarian en combate a la vez. Solo necesitaba que una legión de Cras decidiera emprender la huida para que forma tal caos en lo alto de la cima, que la tomarían sin problemas. "Hay que ser pacientes" se decía así mismo. Pero la segunda fase no iba a ser mejor que la primera. Su primera legión de Hastatii llevaba las de ganar contra la primera de Hastatii de Cras, en cambio la segunda recibió una oleada de pilums que la dejó mermada a la hora de atacar y la tercera legión de Hastatii Pompusiana se enfrentaba a la tercera de Hastatii Crasiana, pero parecía un combate épico e igualado. Por el flanco las cosas empeoraban. La segunda de Hastatii Crasiana esperaba el ataque de Vélitex Pompusianos, mientras que de los Triarii Crasianos unos aguantaban en envite Vélite y los otros acababan con las siguiente Legión de Equites que se les echaba encima.
Pompus observaba perplejo, como a lo lejos su ejército llevaba la peor parte, pero aún no estaba todo perdido; el contaba con segundas filas competentes de Priceps y Triarii, mientras que Cras no tenía tantas. Además aún le quedaba una legión de Equites en reserva. Pero en la tercera fase del combate llegó lo peor. La primera de Hastatii cayó casi al completo, al igual que los Vélites de la vanguardia. Si bien Vélitex y Princeps sustituían rápidamente a sus compañeros muertos, pero los cadáveres era otra dificultad añadida. Las tropas de Cras estaban situadas en alto y por si fuera poco estaban construyendo un muro en la base, pero un muro de cadáveres Pompusianos. Los Equites cayeron también, y los Triarii Crasianos comenzaron a pivotar para atacar por el flanco a sus Vélitex. La pinza se había roto.
Pompus lanzó rápidamente a su equites de reserva para volver a cerrar la pinza, pero los Equites Crasianos habían abandonado la montaña para enfrentarse a ellos. Las cosas estaban igualadas. El combate había empezado con una clara ventaja para Pompus pero ahora veía como su ventaja se desvanecía para dar paso a unas tablas en combate. "Hay que ser pacientes" seguía recordándose. Sus infantes seguían cayendo, otra legión de Hastatii, ahora solo quedaba la tercera en pie. Tercera de Hastatii contra Tercera de Hastatii, y ambas parecían estar en un combate sin igual que duraría hasta el fin de los días. "No está todo perdido. Si mis Equites superan a los suyos podré rodear sus tropas y la victoria será mía". Podría así Pompus tomar el flanco izquierdo Crasiano. En cuanto al flanco derecho, ahora que él contaba con infantería pesada y Cras solo contaba con infantería ligera, también podría tomarlo.
En la siguiente sesión de combate, el flanco derecho Crasiano empezaba a caer, la infantería ligera Crasiana no era rival para la infantería pesada Pompusiana. Pero los dioses eran crueles, y Pompus empezaba a verlo con claridad. La vanguardia empezaba a ceder al empuje Crasiano, y en cuanto al flanco izquierdo......, cuando los equites iban a chocar en combate, del bosque apareció una legión equite Crasiana. Se avecinaba a la carga a la espalda de sus equites. mientras que éstos no veían que tenían enemigos enfrente y detrás. El general Xanariano casi se cae de la silla de su montura. Su última legión de Equites desapareció en segundos. La pinza seguía rota, y lo que era peor, ahora dos legiones Equites Crasianas comenzaban la carrera para rodear las tropas y tomar a sus hombres por la espalda. Ahora la pinza se estaba cerrando contra sus hombres. Mientras que el otro flanco seguía aguantando y la vanguardia estaba siendo vencida claramente.
Pompus lo vio claro. Había sido un autentico imbécil. La colocación de las tropas era superior. Habían ocultado una legión entera en el bosque para tomarlos por sorpresa y ni se había dado cuenta de la falta de ésa legión. Pero la causa principal, era que había subestimado a Cras. ¿O tal vez no? tal vez esto no fuera obra de Cras. Nunca antes había sido tan astuto. Tal vez el rumor de que contara con un general al que llamaban "El Señor de las Huestes" tuviera algo que ver. Pero ya daba todo igual. Todo estaba perdido y era solo cuestión de tiempo. La vergüenza e indignación acudieron a él por igual....Si hubiera ido junto a sus hombres le habría influido algo de moral, tal vez lo suficiente como para desequilibrar la batalla. Si hubiera prestado atención, se habría dado cuenta que faltaba una legión y lo habría tenido en cuenta, tal vez hasta habría podido prever que se encontraba en el bosque. Si no hubiera confiado tanto en su superioridad numérica habría tenido en cuenta el terreno y la desventaja que suponía para él. Si no hubiera........ Con las lágrimas a punto de salir de sus ojos.....Pompus giró su montura y sin pronunciar palabra.....abandonó a sus hombres a su suerte.

Solo quedaban cuatro legiones en pie, tres de ellas no estaban completas pues habían sufrido el combate. La cuarta no había podido entrar en combate pues sus compañeros habían sido aguantados con tenacidad por las tropas Crasianas, pero veían a las dos legiones Equites acercase inexorablemente para acabar con ellos. Todo éso ocurría tiempo después de que Pompus se retirara. Todo éso ocurría cuando el Primer Centurio Cayo Gneo Agrícola decidía rendirse a Cras, y esperar que éste mostrara más clemencia, que valentía había demostrado Pompus........

Ankalagorn


Lo que le habia propuesto al que llamaban Señor de las Huestes, era algo casi demencial, pero hasta ahora el oraculo habia acertado en todo y la confianza que tenian el y sus generales lo hacia complicado, para tener que darles una negativa. Segun decian, alla de donde venian, habian ganado otras batallas, incluso mas grandes que esta, donde el mismo Mundo habia estado en juego y habia sido ese Dragon Negro, junto a sus generales, los que habian llevado a vencer todas las guerras, pues Ankalagorn, no conocia la derrota en el campo de batalla, y eran ya varios campos de batalla los que habia conocido, pero estaba en juego ni mas ni menos que su pais, Xanarian, y el Numenoreano Negro, junto con un histrionico Kang,le dijeron que si queria vencer a Pompus, debia dejar la estrategia y la batalla en sus manos.
Lo delivero toda la noche y lo mas sensato era negarse a tal propuesta, pero las fuerzas de Pompus eran superiores en numero y era un mejor estratega que el. Glerio se opuso abiertamente a esa locura:- En que ha fallado hasta ahora el oraculo?- Prregunto Cras- Ha acertado todo!. Si no confiamos en la pericia de estos extranjeros, perderemos la guerra. Sabes que los refuerzos no llegaran a tiempo...

Las tropas se pusieron en marcha a primera hora. Kang, Ankalagorn,Ragnarock,Glerio y Cras observaban el plano del terreno detenidamente. Se pusieron de acuerdo que coronando la Cima del Halcon, podrian tener ventaja sobre Pompus, pero sin duda Pompus habria decidido algo similar y este contaba con el tiempo a su favor:
-Dejame ponerme al mando del ejercito y llegaremos a esa cima antes que Pompus... y con los hombres frescos para el combate.
Parecia un imposible, Pompus era el mejor estratega que conocia y manejaba su ejercito como si se tratara de un apendice de su cuerpo mas.
-Podrias conseguirlo?-Pregunto el General.
Kang y Ragnarock confirmaron con un gesto afirmativo de su cabeza. Ellos conocian mejor que nadie el potencial de manejar las masas que tenia Ankalagorn.
-...Y frescos para el combate- Volvio a decir Ankalagorn con una sonrisa confiada.
- Llevanos a la cima.
-Es una locura- Exclamo Glerio por bajo.

Habia llegado el dia y como habia prometido Ankalagorn, los hombres de Cras, coronaron la Cima del Halcon antes de que el ejercito Pompus apareciera en el horizonte.
-En aquel bosque de alla podemos ocultar una legion-Dijo Ankalagorn.
-Podemos ocultar parte de la caballeria- Dijo Kang.
A Ankalagorn no le gustaba demasiado la idea de prescindir de una legion de caballeria, que en carga colina abajo le daria mucha ventaja, pero siempre escuchaba a sus generales y Ragnarock le termino de convencer con su aprobacion a lo que decia el Calvo.
-Pero si escondemos una legion en el bosque Pompus se percatara que falta una.-Dijo Cras.
-Es posible que lo intuya-Replico Ankalagorn- pero no lo vera. Al juntar todas las lineas en lo alto de la colina sera confuso y no se percatara, ademas por el punto de elevacion le sera imposible ver las legiones que hay tras las de la primera linea...eso si, si intuye que en el bosque tenemos una legion oculta, sera aniquilada...pero se arriesgaria a mandar 2 legiones al bosque y perder efectivos en el grueso? Creo que no. Asi que mientras permanezcan bien ocultos y atentos a la orden, todo saldra bien. Ese ataque por la retaguardia puede ser la picelada que nos de la victoria.

Parecia increible. Mientras Cras habria propuesto una batalla para aguantar y que llegaran los refuerzos, Ankalagorn y los suyos planteaban como ganar la batalla en ese momento. Habia estado pendiente de la charla estrategica; parecian puntos simples y faciles de ver, pero sin embargo nadie era capaz de ver como lo hacian estos extranjeros y esa era la cualidad de los mas grandes estrategas belicos de la historia: hacer parecer facil, lo que realmente era muy dificil y lo que era mas dificil aun, hacer que lo vieran facil los que los escuchaban. Ankalagorn y sus generales no solo eran capaz de conocer la estrategia a llevar a cabo, sino que sabian como pensaba su enemigo, sin nisiquiera conocerlo.
Todas las previsiones se cumplirian. La victoria era suya.

KANG


-Ha sido una gran victoria- uno de los lictores felicitó a Cras.

Días antes.

Cras había convocado a su plana mayor en su tienda. Había un cierto aire regio en la decoración, un poco sobrio para lo que un gran líder se trataba, Ankalagorn ya había estado en situaciones similares y algunos reyes se engalanaban con todo tipo de tesoros en sus aposentos, cras no era así. Sobre la mesa una gran plano del territorio.

Las legiones pompusinas avanzan desde el oeste a marchas forzadas, tratan de cercarnos.- cras señaló el punto donde se encontrarían más o menos las tropas de pompus. -Estimamos sus tropas entre ochenta y cien mil hombres, nosotros contamos únicamente con sesenta mil- el calvo se frotó el mentón con la palma de la mano. Anka ya sabía que el viejo zorro estaba estudiando el mapa. No era la primera vez que combatían con menor número de hombres y vencian.

De un golpe de vista el señor de las huestes señaló un punto en el mapa. Una vasta planicie dominada por una colina que se abría paso como una daga en medio en la planicie. –aquí – dijo poniendo su dedo en el plano. Este es el lugar que mas nos conviene- cras miró con recelo ese punto.- es demasiado amplio, pompus podrá desplegar todas sus legiones y el numero está en nuestra contra- Ankalagorn le miró directamente con cara de reproche, pero fue el calvo quien respondió por el señor de las huestes. – si nos hacemos fuertes en la colina su número no servirá de nada. Cras seguía sin verlo claro.- anka dejó que el calvo continuara.- ellos podrán formar, un ataque frontal con punta de lanza está descartado, la propia orografía de la colina lo impide, lo que intentará será una pinza. querrá reversarnos por los flancos. Kang repartió las figuras que representaban las legiones por el mapa. Anka observaba, sabía que al calvo había estudiado mucho las formaciones de combate, tácticas y movimientos. Era una de sus pasiones. Sabría colocar a las tropas de la manera más efectiva, era un buen general, pero la astucia del señor de las huestes no tenía rival. Primero escuchaba, contemplaba y luego crearía la trampa mortal. A su vez Kang había distribuido todas las tropas e incluso había aprovechado un bosque paralelo a la colina para esconder a toda una legión de caballería.

-Eso es un error- sentenció cras al ver a su caballería escondida, aislada. – puede que si y puede que no. Ellos intentaran rebasar nuestra línea por el flanco será entonces cuando tus équites nos den la victoria- fue la respuesta del señor de las huestes. -Será allí donde resida nuestra victoria, el centro y el otro flanco han de resistir mientras destruimos ese flanco, luego los envolveremos atrapándolos contra el yunque y el martillo. La propia colina nos hará de pantalla. Los pompusinanos no podrán ver qué ocurre al otro lado de la colina, mientras nosotros con un par de legiones que dominen la cumbre, podremos reforzar la línea que se vea en dificultades. La clave está en no ceder ni un palmo de terreno. Los muertos serán otro obstáculo que tendrán que superar las legiones pompusinas, además de la pendiente, sus hombres estarán en clara desventaja, mientras cada uno de los nuestros valdrá por dos.

Dos días después

Los dioses de cras le habían sonreído. El campo de batalla era suyo. Rápidamente tomaron la colina, era empinada pero carente de graba o tierra suelta. Un pedazo de roca inmenso y firme coronada por una suave meseta. El único punto flojo de toda esta trama era que la colina no era lo suficientemente amplia para acoger a las nueve legiones. El planco opuesto al del bosque tendría que pelear en igualdad de condiciones contra las tropas pompusianas. Sería allí donde tendrían que colocar a las mejores tropas de cras. Habrían de resistir a toda costa.

Pero seguían teniendo el problema del espacio, Ankalagorn estaba preocupado. – si no podemos maniobrar estamos perdidos. – el calvo lo tranquilizo- esa legion de hastatii que hemos colocado en vanguardia caerá en las primeras de turno y será replazada por triarii eso nos dejará margen de maniobra- iban a sacrificar a toda una legión en los primeros envites. Todo era muy arriesgado.

Las legiones de pompus a parecieron a primeras horas del día. Incrédulos vieron como las legiones pompusianas avanzaban mientras pompus se quedaba detrás en su campamento.

-Ha cometido un error- los hombres luchan mejor con su líder, derramaran mejor su sangre si saben que el que los conduce a la batalla comparte su destino- la voz de anka era como un preludio-

Todo ocurrió como había dictaminado el calvo. Las legiones de pompus intentaron pinzarlos. Pero chocaron con el muro crasiano. No solo aguantaron el primer envite sino que destrozaron las primeras líneas pompusianas. Aquello empezaba mejor de lo que habían imaginado. Incluso los hastatii se mantuvieron firmes y aplastaron sin problemas a la homónima legión pompusiana. La pinza en el lado del bosque la accionaron la caballeria pompusiana allí los esperó la legion crasiana de triarii en perfecta formación. El estruendo silenció el valle y pompus vió como la elite de su caballería había sido consumida, destruida. La colina empezó a bañar la pradera con ríos de sangre. Las cosas en el centro iban bien, la segunda legión hastatii de pompus fue destruida por la crasiana, otro revés. El otro flanco aguantaba el envite de las tropas pesadas pompusianas sin problemas. El calvo sonreía todo estaba saliendo al milímetro. Cuatro legiones de pompus habían sido aniquiladas y ellos apenas si habían sufrido.

Pero todo tiene un precio. Las tropas de infantería ligera habían sido remplazadas por las pesadas. En centro crasiano fue barrido en un rápido intrecambio, a pesar de ello los hastatti pagaron cara su derrota. Era el momento de emplear a la legion de triarii de reserva crasiana.

Los pasos firmes resonaron y las dos legiones se enfrentaron, la moral y la sed de venganza por sus cámaras hastatii hicieron de los hombres de cras verdaderos hijos de la muerte.

En el flanco del bosque la legión escondida recibió la orden de atacar, como almas que lleva el diablo emprendieron una carga contra la legión de princeps que se enfrentaba a los triarii de la colina. Pillados por el flanco recibieron un impacto titánico. A pesar de todo no rompieron la formación. A su vez la segunda legion de équites de cras empezó a rodear a la primera y se dirigía a la retaguardia central del pompus.

En el centro la cosa estaba en tablas hasta que la legion bendecida por el estandarte con toda la plana mayor al mando entro en liza. Aquello termino de ser el mazazo que terminó por desmembrara la pinza pompusiana. En centro aniquilado el falco del bosque destruido. Solo quedaba en pie el otro flanco que apenas si había podido morder un poco a los hombres de cras. La única legión de pompus que no había entrado en combate se rindió ante la supremacía de las tropas crasianas en el campo de batalla.

Si fue una gran victoria, kang y Anka se miraron, ambos compartieron las mieles de la victoria, aunque fuese cras quien se adjudicase el triunfo.