Bienvenidos a la 6ª Edad de los hombres
¿Quieres reaccionar a este mensaje? Regístrate en el foro con unos pocos clics o inicia sesión para continuar.

Bienvenidos a la 6ª Edad de los hombres

Partida de rol por posteo( sistema The riddle of steel (TROS))
 
ÍndiceGaleríaBuscarÚltimas imágenesRegistrarseConectarse
Buscar
 
 

Resultados por:
 
Rechercher Búsqueda avanzada
Últimos temas
» El Este. Seygoh-Yu (Bello Amanecer)
Corazon Oscuro (y 3). Capitulo XII Icon_minitimeMar Jul 30, 2019 1:03 pm por Ankalagorn

» TIRADAS DE VICTOR (YAsuo)
Corazon Oscuro (y 3). Capitulo XII Icon_minitimeLun Jul 29, 2019 5:53 pm por Ankalagorn

» Ficha de Tarsil
Corazon Oscuro (y 3). Capitulo XII Icon_minitimeMiér Mayo 09, 2018 1:37 pm por Abdulfin

» tiradas de Lothar
Corazon Oscuro (y 3). Capitulo XII Icon_minitimeSáb Mar 31, 2018 9:41 pm por Ankalagorn

» El Este: en busca de un futuro prometedor.
Corazon Oscuro (y 3). Capitulo XII Icon_minitimeSáb Feb 24, 2018 10:29 pm por Ankalagorn

» La Mano y la Sonbra, Tiradas del Master
Corazon Oscuro (y 3). Capitulo XII Icon_minitimeSáb Feb 24, 2018 9:40 pm por Ankalagorn

» TIRADAS DE JULIO DIMMU
Corazon Oscuro (y 3). Capitulo XII Icon_minitimeVie Feb 23, 2018 6:26 pm por Ankalagorn

» TIRADAS DE JUAN(HALAF)
Corazon Oscuro (y 3). Capitulo XII Icon_minitimeMar Feb 06, 2018 8:53 am por Ankalagorn

» Yokor Argun y los Mercenarios
Corazon Oscuro (y 3). Capitulo XII Icon_minitimeJue Ene 25, 2018 6:35 pm por kang


 

 Corazon Oscuro (y 3). Capitulo XII

Ir abajo 
5 participantes
AutorMensaje
Ankalagorn
Ungoliant
Ungoliant
Ankalagorn


Cantidad de envíos : 2823
Fecha de inscripción : 27/04/2009

Corazon Oscuro (y 3). Capitulo XII Empty
MensajeTema: Corazon Oscuro (y 3). Capitulo XII   Corazon Oscuro (y 3). Capitulo XII Icon_minitimeDom Nov 13, 2016 12:45 pm

Angost abrio la puerta para encontrarse con una figura bajita y recia.
-El Comandante Rerverin Puñoacerado?
-No... tu vecino el bajito.- Respondio el enano con sorna.- Chavales, Seguidme, el tiempo apremia.
-Coged las armaduras rojas- Dijo Angost.

Avanzaron calle abajo con celeridad, siguiendo al pequeño personaje. Alli los esperaban 5 carros, con 10 mas de estos seres , que las historias llamaban enanos o naugrims.
- Repartios por los carros-Aviso Reververin- Chicos, cuando estemos todos salimos.
-A la Orden Comandante- Los enanos respondieron al unisono. La banda del sastre no sabia bien que estaba pasando, de momento la informacion que habia dado el comandante era ninguna.
A Lothar le toco cerca de Reerverin.
-A donde vamos?
- Al puerto.
-Al puerto? El Santo Padre esta en el muro.
- Lo se...como estaba previsto...
-estan todos, Comandante- Dijo el enano que conducia el carro.
-Si...eso no estaba tan previsto... que estuviese toda la ciudad en el muro... Mejor para nosotros- Dijo el comandante sonriendo o lo que parecia ser una sonrisa bajo esa tupida barba- Llegaremos mas discretamente al puerto.
Angost observo las lonas que tapaban el cargamento de los carros. Recordo que habia visto algunas muy parecidas o esas, la noche que fue con Halaf al almacen de los enanos, el cual antes era suyo.
-Una patrulla- Dijo el Comandante ante un gesto casi imperceptible de uno de sus hombres que iba en cabeza, con Tyrok y otro enano mas.
-Alto! - Dijo el suboficial de los 6 guardias que comandaba. Los carros se detuvieron.
-Buenas noches- Grito Reerverin, levantandose desde su carro- Soy el Comandante Reerverin de la Septima Legion, tenemos que seguir.- Su voz sono imperante y seria.
- Que llevan en los carros?- Dijo el Suboficial. Tyrok observo al enano que conducia su carro, como escondia una ballesta cargada entre sus piernas, mientras empezaba a agarrarla cuidadosamente.
-Registradlos- Dijo el Suboficial. Seguidamente la mano del compañero de Tyrok volo a la velocidad del rayo, agarrando la ballesta, presta para disparar, apunto entre los ojos del Suboficial y donde antes estaba el puente de la nariz, ahora habia un pivote en su lugar, el guardia se balanceo y cayo de bruces, mientras sus hombres comenzaban a agitarse, y a apoderarse de ellos el caos. No fue el caso de los enanos, que varios mas de ellos ensartaron a 3 guardias mas con sendas ballestas que escondian en sus carros, mientras los que no dispararon, bajaron al unisono del carro, con armas de melé, preparadas para impactar contra los cuerpos enemigos.
El golpe de acero contra chapa, inundo la oscuridad de la noche, acompañados por gritos de dolor, que se elavaron por encima de los tambores orcos.
Los enanos sin apenas pestañear habian matado de manera rapida y cruel a la misma guardia de Tharbad.
-Arriba- Dijo el Comandante- Continuamos!...rapido rapido!
-Ese pobre idiota- Dijo el compañero de Tyrok- A quien se le ocurre ir sin narizal... estos humanos siempre pensando en su belleza...- Sonrio con sus diente amarillos a Tyrok.

Media hora despues, sin mas contratiempos entraron al puerto. Tharbad permanecia vacia, si no fuera por aquella multitud que se reunia sobre los muros y su murmullo continuo que se escuchaba en la lejania, aquello pareceria una ciudad fantasma.
-Nos van a sobrar flechas...- Dijo uno de los enanos.
-Que pasa?- Dijo Halaf.
-Esperabamos mas problemas para llegar al puerto- Dijo Reerverin- Venid conmigo los 5. - Los sastres obedecieron , mientras veian como los enanos se desplegaban por el puerto, para desaparecer en la oscuridad. Reerverin se dirigio hacia el faro que alumbraba la llegada de los barcos a puerto. Abrio la puerta y comenzo a subir las escaleras. Un hombre mayor le salio por el camino- Que es esto?! Quienes son???- Reerverin contesto con su estrella de la mañana, impactando el lateral de la cabeza del hombre.- Comprobad que todo este limpio- Dijo el comandante- Hombre que queda vivo, hombre que puede avisar.
- Avisar de que?- Pregunto Lothar- Aun no sabemos que hacemos aqui.
-Pronto lo sabreis- Reveerin se asomo por una de las ventanas e hizo una señal con su mano.
Una vez limpio, se reunieron abajo con los demas- He eliminado a uno.- Dijo uno de ellos- Yo otros 2- respondio otro- Por mi parte todo limpio.
- Ahora los barcos- Susurro Reerverin- Vosotros no. Vuestra mision es el Santisimo y no podeis morir ninguno.
Los enanos comenzaron a subir a los barcos que habian venido con el Santo Padre: Primero El Lucero del Alba, despues el Baron de los mares y por ultimo  el Luz de Eru. Los enanos eran tan silenciosos como efectivos. Este grupo no era el tipico grupo de enanos de armaduras gruesas y ruidosos. -Perfecto- Dijo en voz baja  reerverin.

Mientras los enanos comenzaban a desatar las lonas y a sacar las cargas, que no eran otra cosa que barriles, los sastres se reunieron con Reerverin- Teniais unas armaduras del ejercito rojo no? -No dejo responder- Poneoslas mientras os voy explicando:
- El puerto va a quedar inutilizado. Los barcos mas grandes con el timon destrozado y llenos de esa sustancia inflamable- Señalo a los barriles- a la que prenderemos antes de dejarlos sin rumbo con los amarres cortados.
-Sabeis mucho de barcos para ser enanos- Bromeo Angost. El enano no se lo tomo a broma.
- Desde tiempos de la Torre Oscura, el Comandante Groomch, ha mantenido en la costumbre de la Septima, entrenamiento naval...por que cojones, si somos enanos y encima estamos en el puto desierto? Pues he aqui la respuesta... Desde el maestro Gringworth, Maestro de combates navales de la Torre Oscura, hasta el dia de hoy... Nuestro General es sabio, chico! Ahora...no interrumpas mas!
Alli, en la oscuridad- Dijo señalando el oscuro horizonte, mirando hacia el mar, mas alla del puerto. - Hay un barco, grande y oscuro. Sobre el esta Lord Ulfast esperando.
-Para que?
- Para desatar su poder. Las olas obedeceran sus ordenes y creceran tanto que ningun barquichuelo, que no sean estas grandes moles que estamos inutilizando, podran salir del puerto. Es la unica via de escape de la ciudad y la estamos cortando. Tendreis que acercaos al Santo Padre, en el muro y convencerlo para que os acompañe hacia un pasadizo secreto. La unica forma de salir de aqui, yo os acompañare. Lo cierto es que ese pasadizo existe y cuando el Santo Padre vea sus barcos ardiendo y el temporal que azota el puerto, sera la unica via de escape de Tharbad. Por la que saldreis, tras haber terminado vuestro trabajo. En el pasadizo sera el momento. Nadie tendra posiblidad de vernos.Os mostrare donde esta el pasadizo, de camino al muro. Fuera os esperara una barca. Lord Ulfast prara la tormenta a nuestra señal.
-un momento...un momento... eso esta muy bien- Dijo Angost- Pero como nos acercamos al Santo Padre y como lo convencemos para que os acompañe?
- Para acercarnos es algo que tendreis que resolver vosotros...teneis trajes de guardia roja, aunque la guardia dorada es la que mas cerca tiene... para convencerlo...
-Esta llegando el alba.- dijo uno de los enanos. En el horizonte del mar aparecio la silueta de un gran barco negro. Uno de los enanos, desde lo alto de una torre, hacia señales con una bandera color naranja al barco.- Lo se- Dijo Reerverin. Ya sabeis como son los orcos, chicos. Esta previsto que ataquen a medio dia, pero ...
-Ya...ya... -Dijo uno de los enanos.
-Id terminando- Dijo Reerverin.- Como decia ...para convencerlo, teneis que decirle...

El sol comenzaba a despuntar por el Este, cuando los Sastres llegaron a la altura del muro. Tenian que llegar hasta el Santo Padre, pero como. No tenian mucho tiempo para pensar un plan.Practicamente todo Tharbad esperaba la bienvenida a los orcos ansiosos. nadie queria perderse actuar la Boca del Dragon. Los orcos comenzaron a desplegarse ante la orden de Frank y grandes torres de asedio comenzaron a avanzar hacia los muros de Tharbad... -Lo sabia...- Habria dicho alguno de los enanos si hubieran estado alli- No podian aguantar hasta medio dia...putos orcos!- Las catapultas de los orcos comenzaron a cargar, mientras...el Santo Padre miro hacia los artificieros que controlaban la enorme Boca. Sonrio. Y gracilmente, como con desgana levanto su mano, dando la señal. Los artificieros comenzaron a realizar la mezcla, en el momento que los sastres llegaban a lo alto del muro...demasiado lejos aun del Santo Padre. Todos observaban como la primera ola orca avanzaba hacia los muros, mientras los hombres de Tharbad comenzaban a preparar la mezcla "magica" como les habian enseñado los enanos...La maquina parecio preparada y el Santo Padre hizo la señal. Disparad!!!!!! Grito uno de los oficiales. Los artificieros prendieron la mecha... y BOOOM!!! el sonido fue atronador. Las miradas de confianza y orgullo de los de tharbad se conviertio en horror. El Santo Padre ojiplatico, miro  hacia donde antes habia estado la Boca del Dragon...

- Como decia ...- Les habia dicho Rerverin- para convencer al Santisimo, teneis que decirle, que los enanos han engañado a Tharbad. Que los muros estan huecos y que las paredes no aguantaran...

El zambombazo se escucho claramente en el puerto. El enano de la torre saco una bandera color Verde y el Mar comenzo a agitarse, mientras las antorchas de los enanos prendieron los barcos. Otros de ellos, comenzaron a cortar los cabos con sus hachas.

La explosion fue bestial. La Boca del Dragon exploto de manera sorpresiva llevandose un gran tocho de muro consigo, a la vez que muchos de los soldados, que estaban a varias decenas de metros...pero por que? Habian hecho tal y lo que e habian dicho los enanos!! Las catapultas orcas dispararon a la voz de Frank, impactando contra las torres dond 15000 de los mejores arqueros aguardaban la orden del Santo Padre, para disparar. Dichas torres se derrumbaron como un castillo de naipes, levantando una gran nube de polvo y cascotes, llevandose consigo la vida de los 15000. La gente de la ciudad comenzo a gritar. Los soldados a ponerse nerviosos. Pronto el caos se apodero de la multitud, al tiempo que una nueva piedra de catapulta impactaba en el muro central , atravesandolo como su fuera de papel y cayendo gran parte de este, con los ciudadanos que habian venido a asistir a una victoria segura de Tharbad.
Frank sonrio y el Santo Padre lo vio... Lo sabian...esos malditos lo sabian...Miles de pensamientos recorrieron la mente del Santisimo en ese momento.

La multitud huyendo tropezo con La Banda. Sus caras de puro pavor se cruzo en sus miradas... hombres, mujeres y afortunadamente, pocos niños, algun que otro mercenario. Los Sastres se miraron entre ellos... aquello era terrible...ni en su mas retorcida imaginacion habrian podido imaginar algo asi. La voz de Ankalagorn resono en la cabeza de Halaf:- El pago sera muy alto. -
Por la cabeza de Lothar paso Amapola.
Por la de Tarsil paso Gargel y valary.
Por la de Angost y Tyrok...quien sabe.
Angost miro su mano. Tenia la droga que le habia dado Reerverin..a el y a todos...
- Cuando esteis con el Santo Padre tomaosla- Habia dicho- Es la unica manera de poder acercaos a el. Vuestra Voluntad subira y os sentireis muy seguros de vosotros. Si no lo haceis cuando pida ayuda al demonio, ninguno de vosotros podra acercarse.
-Chicos... que hacemos?!
Volver arriba Ir abajo
https://sextopalio.forosactivos.net
Ankalagorn
Ungoliant
Ungoliant
Ankalagorn


Cantidad de envíos : 2823
Fecha de inscripción : 27/04/2009

Corazon Oscuro (y 3). Capitulo XII Empty
MensajeTema: Re: Corazon Oscuro (y 3). Capitulo XII   Corazon Oscuro (y 3). Capitulo XII Icon_minitimeSáb Nov 19, 2016 11:08 am

Zenden observo como parte del muro en donde estaba el y parte de la guardia dorada cayo, siendo engullida por el polvo y los escombros una cuarta parte de ella, afortunadamente la mayor parte y el con ella aun estaba en pie, pero otro proyectil de catapulta orca, podria echar abajo otras partes de esta muralla u otras.
El siguiente movimiento era claro: repliegue y reorganizacion, lejos de los muros, pero Zenden fruto de la ira y la presion, ocasionada por orcos y enanos...incluso por El Brujo, hizo lo que no debia hacer nunca un gran general, dejarse influir por esas emociones y sin ni siquiera esperar una orden del Santo Padre, envio al resto de sus hombres a la destruccion total:- Miles de buenos hombres, algunos conocidos personalmente, todos con familia han caido en ese ataque...Malditos Orcos! malditos enanos!... Maldito Brujo! Por que has hecho esto? Tu corazon es negro, has vendido a la humanidad! yo te maldigo!!- y añadio- Ataque TOTAL!!!!- Sus hombres miraron extrañados a Lord Zenden y seguidamente buscaron la mirada del Santo Padre, pero el Santo Padre estaba inmovil, era una estatua de carne , preso del horror.La Guardia dorada se lanzo casi por completo, a traves de los escombros y la puerta que se empezaba a abrir, de manera desordenada y descorazonada. A una voz los Orcos de Frank, adoptaron posiciones ordenadas impropias de cualquier ejercito orco, en la historia, pero ese era el poder de Frank.
Pronto las tropas de Zenden fueron engullidas por las oleadas enemigas,Zenden miro con horror su error un error que condenaba al mundo. Lo vio todo perdido- Coged al Santo Padre- Ordeno a un paladin cercano a el. Llegaron 6 de ellos hasta el Santisimo, justo cuando llegaron la Banda del Sastre disfrazada de Guardia Roja, exponiendo lo planeado. Se les unio Zenden...era el momento a propiado... eran 6 paladines y venia el Mayordomo, pero no habria un momento mejor.
En lo alto de la colina donde estaba el supuesto pasadizo, puesto estrategicamente por los enanos, se podia ver el puerto. La gente se arremolinaba , intentando salir de aquella ciudad condenada, pero las pequeñas embarcaciones, eran tragadas por un mar misteriosamente embravecido. El Santo Padre y Zenden miraron con nuevo horror como sus 3 barcos ardian, mas alla del puerto y un extraño barco negro mas al fondo, que casi se confundia con el horizonte. Solo habia una salida... El Santo Padre no se fiaba que los enanos hubieran dejado alguna trampa o emboscada en aquel pasadizo, por lo que no lo dudo. Su boca articulo unas palabras en un idioma horrible, que nadie pudo escuchar y se lanzo pasillo adentro con sus hombres.La Banda del Sastre lo unico que hizo antes de entrar a aquel pasillo fue pensar...
Pensar en Amapola, pensar en gargel, en Valary, en los vecinos de la Sastreria...familias completas, padres, hijos, abuelos...la misma Sastreria, sus telas, sus dedales y agujas, sus enseres, sus armaduras, sus posadas, sus barrios marginales, hasta no poder matar a Davelorth con sus propias manos... "no mirad atras. El precio sera muy alto. "

El combate fue bestial. El Santo Padre era un enemigo terrible al igual que Zenden y si no es por el veneno, seguramente no habrian podido cumplir con el objetivo.
El Santo Padre se tambaleo ,intentando golpear a Lothar, giro sobre si mismo y Lothar lo esquivo facilmente. En su mente siempre quedo si hubiera sido capaz de esquivar un nuevo ataque en la situacion que se encontraban antes de hacerle efecto el veneno. Halaf habia rezado para que aun quedara veneno en su arma, despues de haber haber golpeado la armadura de Santo Padre.
-Malditos!. - Grito el Santo padre tosiendo- Habeis condenado la humanidad! Espero que seais conscientes de ello!- Lothar levanto su visor, el Santo padre agonizaba apoyado en la pared del pasillo. Su rostro estaba palido y las venas del rostro estaban marcadas de color violaceo- Decidselo de mi parte al Brujo o a quien este detras de esto. Lo vere en el Palio- La sangre broto de su boca al toser- Os maldigo a todos... No os queda ...- Siniestra atraveso la boca del Santo Padre y ya nunca mas volvio a hablar en esta vida.

Llegaron a la salida del pasillo Una barca con remos esperaba. Uno de los enanos saco una bandera blanca y comenzo a hacer señales al barco negro. El barco devolvió la señal. Por arte de magia el temporal sin nubarrones, fue cesando paulatinamente- A los remos- ordeno Reerverin- Que pensais Sastres??? Venis u os quedais?!
Volver arriba Ir abajo
https://sextopalio.forosactivos.net
Haral
Gandalf el blanco
Gandalf el blanco
Haral


Cantidad de envíos : 843
Fecha de inscripción : 28/04/2009
Edad : 44

Corazon Oscuro (y 3). Capitulo XII Empty
MensajeTema: Re: Corazon Oscuro (y 3). Capitulo XII   Corazon Oscuro (y 3). Capitulo XII Icon_minitimeSáb Nov 19, 2016 6:43 pm

Parecía que todo iba mal. Peor que nunca. Yo seguía agazapado junto a Tarsil y casi una decena de enanos. Los golpes de las piedras seguidas por enormes estruendos y temblores hacían que en mi mente se dibujara lo que estaba pasando. Los muros caían como si estuvieran hechos de arcilla. Los gritos de la gente presa del pánico hacía que mi corazón se acelerase.
No podía ser, esto ya lo había vivido.
Y recordé. Recordé aquella fatídica noche en la que la banda del sastre casi destruye Tharbad con un incendio. Unos cuantos años después parecía que cumplíamos aquel objetivo fallido. Era irónico. Más que eso, pues parecía que habían pasado siglos desde aquel episodio.
Tarsil apretó mi brazo, el resto de la banda se acercaba. Pero no venían solos. Media docena de guardias dorados y Zenden. Estaba claro que no vendría solo, y aquello era bueno, pues no eran mucho. La ventaja numérica estaba de nuestro lado. Además habíamos envenenado nuestras espadas. Esto me hizo recordar a Tyrok y me tranquilicé.
Clarisse. Lo hacía por Clarisse. Pronto volveremos a estar juntos.

No sé en qué momento pasó, pero de repente ya estaba en mitad de la pelea. Lothar, Tyrok, Angost y yo rodeábamos al Santo Padre.
"Llevará hechizos que desviarán vuestros ataques" recordé que nos advirtieron. Así que mis primeros ataques fueron flojos. Para inutilizar su hechizo.
Pero en el primer golpe casi mata Lothar. En el segundo mandó lejos a Angost de una patada. No había tiempo de juegos. Ataqué con fuerza, pero no conseguí herirle. Angost estaba otra vez en la lucha junto con Lothar. El Tahur si consiguió herirle. Pero no parecía nada serio.
Descargué mi arma con rabia y note como atravesaba armadura, pero ni se inmutó. Angost lanzó otro golpe certero, mientras que el Santo Padre con un ataque inusual dejaba fuera de combate a Tyrok, quien tras recomponerse y presa de los nervios perdía el arma.
Escuché varios gritos de enanos a mi espalda. Estaban cayendo. Pero no podía mirar, el enemigo que tenía en frente merecía toda mi atención. Lancé otro ataque no hizo y me devolvió el golpe. Me ví muerto.
"Clarisse lo siento" pensé. Pero los dioses no nos habían abandonado, y el golpe no me mató.
Lance un espadazo con toda mi furia a su brazo y volví a atravesar la armadura. Esta vez sí vi salir sangre. No mucha, pero su armadura comenzaba a llorar lágrimas rojas.
Por Ilúvatar, que quedase veneno en la hoja.
Tyrok aún no se recomponía y el cansancio hacía mella en el resto.
A mi espalda un grito desolador hacía presagiar que alguien importante había muerto. Las risas enanas me dejaron claro que se debía tratar de Zenden.
"Anímo" grite, y mis compañeros y yo volvimos al ataque. El futuro de la humanidad estaba en juego. Ningún ataque llegó a ser efectivo, pero el Santo Padre caía. Había veneno en la hoja.
Malditos!. - Grito el Santo padre tosiendo- Habeis condenado la humanidad! Espero que seais conscientes de ello!- Lothar levanto su visor, el Santo padre agonizaba apoyado en la pared del pasillo. Su rostro estaba palido y las venas del rostro estaban marcadas de color violaceo- Decidselo de mi parte al Brujo o a quien este detras de esto. Lo vere en el Palio- La sangre broto de su boca al toser- Os maldigo a todos... No os queda ...- Siniestra atraveso la boca del Santo Padre y ya nunca mas volvio a hablar en esta vida.

"Vamos sastres. Venís u os quedais" grito el enano. Y yo escuche al Brujo una vez más en mi cabeza.
"Haréis lo que se os diga, sin mirar atrás. El precio será alto", cuanta razón llevaba.
Gritos y más gritos. Pero me subí a la barca a remar.....sin mirar atrás.
Volver arriba Ir abajo
Tyrok
Noldor
Noldor
Tyrok


Cantidad de envíos : 412
Fecha de inscripción : 28/04/2009
Edad : 44

Corazon Oscuro (y 3). Capitulo XII Empty
MensajeTema: Re: Corazon Oscuro (y 3). Capitulo XII   Corazon Oscuro (y 3). Capitulo XII Icon_minitimeSáb Nov 19, 2016 8:00 pm

Un golpe sucedía al siguiente, parecía como si estuviésemos luchando contra un hombre de piedra, Tyrok deseaba levantar el yelmo de aquel ser sobrenatural para poder ver si realmente había un hombre bajo aquella armadura. La Serpiente siempre había pensado que este encargo no se debía de llevar por medio del combate, y a punto estuvo de costar la vida a más de uno de nosotros, el demonio que habitaba dentro del Santo Padre lo hacía poderoso como 5 trols juntos.

- ¡Malditos! - Grito el Santo padre tosiendo - Habéis condenado la humanidad! Espero que seáis conscientes de ello! -Lothar levanto su visor, el Santo padre agonizaba apoyado en la pared del pasillo. Su rostro estaba pálido y las venas del rostro estaban marcadas de color violáceo - Decídselo de mi parte al Brujo o a quien esté detrás de esto. Lo veré en el Palio- La sangre brotó de su boca al toser - Os maldigo a todos... No os queda ...- Tyrok buscó su daga para atravesar el gaznate de aquel pobre desgraciado como al él siempre le gustaba con un arma corta para sentir el calor de la sangre del enemigo deslizándose por su mano, pero Lothar se adelantó y Siniestra atravesó la boca del Santo Padre y ya nunca más volvió a hablar en esta vida.

Era el momento de montar en aquella barca y huir, dejar atrás la ciudad que nos había visto crecer. Ninguno quiso mirar atrás, salvo Tyrok, él si que lo hizo, para ver como el caos se apoderaba de todo Tharbad y volvía a hacer cenizas aquella reconstruida ciudad. La que fuera la segunda ciudad más importante iba a quedar reducida a meros escombros, y esta vez, tan solo se salvarían aquellos que sirviesen como esclavos.
Tras echar una ojeada, su rostro volvió a mirar al frente. Nada ya lo unía a aquella ciudad y a aquellas gentes, solo deseaba que Daverloth hubiese caído… pero no, seguro que no, aquella alimaña tenía demasiada suerte y seguro había encontrado la forma de poder escapar ileso.
Tyrok puso la mano sobre el hombro de su amigo Lothar, sabía que había perdido a un ser amado y perecía que podía escuchar los trozos de su corazón caer hechos trizas al suelo.

- Mira al frente amigo mío, aún nos queda un largo camino por recorrer – fueron las palabras que dijo a Lothar

Lo único que había conseguido que Tyrok no perdiese toda su humanidad eran sus tres amigos, gracias a ellos, La Serpiente aún era capaz de levantarse cada día con ilusión por algo, en lugar de ser más que un mendigo o quien sabe si algo peor.

Volver arriba Ir abajo
Ankalagorn
Ungoliant
Ungoliant
Ankalagorn


Cantidad de envíos : 2823
Fecha de inscripción : 27/04/2009

Corazon Oscuro (y 3). Capitulo XII Empty
MensajeTema: Re: Corazon Oscuro (y 3). Capitulo XII   Corazon Oscuro (y 3). Capitulo XII Icon_minitimeDom Nov 20, 2016 12:09 am

Remaron y remaron con rabia. Querian dejar de escuchar los gritos y los llantos, y los enanos no eran menos. Hicieron todo el trayecto en silencio, aquellos sonidos de la guerra no parecieron acabar nunca…de hecho nunca lo hicieron, como descubrirían mas adelante.
Llegaron al barco negro, Corsario Intrepido era su nombre, sobre el aquel que los enanos llamaban Lord Ulfast esperaba, acompañado por un puñado de mercenarios Corsarios y el Comandante en jefe de La Septima Legion, el cual no parecía tener un color muy saludable, posiblemente por el mareo producido en aquel barco.
-Como ha ido? –Pregunto Groomch, evitando una arcada.
-Todo según lo previsto- Dijo reerverin con aire sombrio- He perdido a 2 enanos.
Groomch asintió, a la vez que miraba hacia la cubierta del barco de manera triste.
-Caer en combate es la gloria mas grande que hay- Dijo Groomch- Ya esta todo terminado.
Buen trabajo- Les dijo a todo el grupo.
-No paramos a recoger a aque bote que se acerca?-Pregunto Halaf.
-Quienes somos para determinar quien sube y quien no al barco?-Dijo Groomch- or que esperar solo a estos y no esperar a todos los que lleguen, hasta que el barco no pueda transportar a mas gente y cuando ya no entren mas que hacemos? Tranquilo chico, aunque consiguieran legar a Elendil, sus días estarían contados- La mirada de halaf fue de sorpresa. Asi que era verdad?
-No me mires asi- Dijo Groomch- No sabes que ese es el ultimo ejercito capaz de parar a los orcos? Los 4 hermanos no disponen de efectivos. Sus hombres fueron casi aniquilados en el primer ataque a Tharbad. La suerte esta echada…es el fin.
-El fin??- Dijeron todos al unisono- Como hemos hecho esto si es el fin?
-Nosotros básicamente por una gran recompensa. Si…somos asi de crueles. Nos vamos al Lejano Oriente, donde hay tierras aun sin explorar y nos vamos bien cargados de oro. Este mundo tocaba a su fin.
-Como puedes decir eso?!- Dijjo Halaf con los ojos abiertos como platos.
-Es la realidad, muchacho y cuanto antes la asumáis mejor será. Vuestro mundo de humanos estaba podrido y corrupto, pero no os dabais cuenta, vivíais en vuestro pequeño mundo y no lo veíais. Nosotros os dejaremos en Elendil , para que recojáis lo que se os prometio- Groomch se detuvo un momento para echar la pota por la borda- Odio los barcos!- Gruño- Si quereis os esperaremos hasta que volváis y podréis venir con nosotros, como nos dijo Ankalagor. Teneis todo el viaje para discurirlo. O si preferís podréis quedaros en Elendil y esperar que la tempestad os alcance. La única manera de salir de allí será por mar. Los orcos han bloquearan todos los caminos por tierra.
-Se sabe algo de los chicos?-Pregunto reerverin.
-Todos están a salvo en el Oeste. Avanzan hasta el punto acordado- Reerverin sonrio al escuchar aquello.
- Ulfast!- Dijo Groomch- Suelta el pájaro con el mensaje. El Santisimo esta muerto! –Se giro pero antes dijo- Alguna pregunta mas? OFF.Podeis preguntar en flasback aquí.
Groomch se giro, escupio en el suelo y dijo por lo bajo, mientras apretaba los puños- Ya esta hecho Ankalagor, maldito demonio hijo de la gran puta…todos están muertos, para poder cazar a ese cabron.

Era la segunda noche y le era difícil conciliar el sueño. Los camarotes eran pequeños, el mar no paraba de zarandear al Corsario Intrepido, que mas intrépido parecía borracho y las voces no cesaban en su cabeza. Fue en un micro sueño de Halaf donde apareció el Brujo. El lugar volvia a ser el idílico lugar que había elegido subconscientemente Angost. Era agradable, en aquel lugar las voces ya no se oian y tan solo el sonido de las fuentes, el correr del agua y el piar de los pajarillos rompían el relajante silencio.
El Brujo leia en aquella mesa sin sillas, mas próxima al suelo que a cualquier otro sitio, leia un gran libro.
-Cabron…- Dijo halaf.
El Brujo no le presto atención a la groseria.
- Sientate- Le ordeno- Habeis cumplido con vuestra parte y mi parte será pagada, primero en oro y después con vuestras armas.
- Como pudiste hacer esto?!- Pregunto halaf.
- Te recuerdo que eras capaz de hacer cualquier cosa por recuperar el alma de Clarisse?
- Si pero…
- Dije que el precio seria muy alto- Interrumpio- Estuvisteis de acuerdo. Ademas no eres el único capaz de hacer cualquier cosa por tu amada
- A que te refieres?
- -Aun no lo sabes? Si lo sabes. Desde que te pedi a ti la ayuda siempre lo has sabido, solo que no quieres aceptar que algo, que para otros puede ser insignificante, para ti es lo mas importante del mundo. Para mi vuestro mundo no tiene sentido, es un mundo ficticio, para mi no muere nadie, solo una de las 7 almas de estas personas.
- Pero alguna puede ser la Septima alma, las mas importante…- Dijo Halaf.
- Te vuelvo a preguntar. Estarias dispuesto a volver a hacer algo asi por el alma de tu amada y por la de tus amigos?
Halaf agacho la cabeza.
-Con eso ya me respondes, Halaf. Claro que lo volverías a hacer.
-Eres peor que un demonio-Dijo halaf de manera sorpresiva. Ankalagorn se intereso por lo que decía.- Ni un pacto con el Demonio mas terrorífico, podría haber sido peor que firmar este pacto contigo… Me rio de tus Dioses Demonio… son unas niñas comparadas con lo que tu has hecho. Siempre te odiare , yo y los mios.
-Lo siento Halaf-Ankalagorn parecio sincero- Entiendo que es vuestro mundo, pero jamas os dije que este trato iba a ser algo bueno para todos, mas bien todo lo contrario. No podeis sentiros engañados.- Tenia razón , el hijo de mil perras tenia razón.
-Como podremos vivir con esto?- Pregunto halaf llorando.
-Cuando recuperéis vuestras almas, cuando tengas la certeza que Clarisse te espera al otro lado eternamente…desaparecerán las voces.
Este
No
Es
El
Fin
Es un nuevo comienzo
Halaf se despertó de golpe y asomando la cabeza por la escotilla que daba al negro mar de la noche, vomito.
Volver arriba Ir abajo
https://sextopalio.forosactivos.net
kang
Gandalf el blanco
Gandalf el blanco
kang


Cantidad de envíos : 969
Fecha de inscripción : 28/04/2009

Corazon Oscuro (y 3). Capitulo XII Empty
MensajeTema: Re: Corazon Oscuro (y 3). Capitulo XII   Corazon Oscuro (y 3). Capitulo XII Icon_minitimeDom Nov 20, 2016 10:31 am

- Muérete ya cabrón.
Siniestra entró por la boca haciendo saltar unos cuantos dientes antes de que la punta se estampase contra el metal. Su cara era una mueca trémula que daba espasmos. Lothar puso el pie en el pecho y desincrustó la espada, sintió como Siniestra se regocijaba con el Santo Padre. El desgraciado caía como un saco delante del tahúr. Lothar se arrodilló junto al cuerpo. Le quitó los guanteletes y se llevó los anillos. Eran cuatro, uno de ellos un rubí. Otro un sello, una mujer con cabellos de serpiente lo decoraba. Se puso ese en el anular. Era de plata. Cualquiera de los naugrin le habría dicho que so no era plata, sino mitril. Después lo dejó allí tirado. Como un perro.
- ¿Subís o qué, Sastres?- Saltaron a la barca.
Al sortear el meandro y Trarbad se dejó ver. La ciudad se despedía de ellos. Las llamas sobresalían de los escombros que una vez fueron las murallas. Fue entonces cuando escucharon el verdadero sonido del horror. Los gritos de angustia reverberaban y competían con el fuego y su crepitar. La banda no quería mirar, todos remaban. Todos menos Lothar.
Se quedó aferrando su espada por la cruz, mirando el fuego. Amapola ardía con su ciudad. Amapola ardía con su sastrería. Amapola ardía con el Manco y su hogar. Se sintió vacio, como si el corazón se hubiera vuelto negro y el fuego de la guerra lo hubiese tiznado.
La serpiente intentó consolarlo con unas palabras y un brazo por sus hombros. Pero Lothar no le prestó atención. No podía parar de oír cómo la gente se quemaba.
< El precio será alto. Hijo de perra. Cuantos han de morir…>
Lothar había aceptado el encargo por profesionalidad y vanidad. Ahora cada grito, cada muerte le perforaban el alma y no podía resistirlo. Empezó a llorar. Primero de impotencia, luego de rabia y al final de pura congoja y desconsuelo.
< Guerras, demonios, señores del caos jugando con miles de vidas. Podriros en el infierno>
Subieron al intrépido. Lord Ulfast resultó ser un hombre alto con la misma cara rancia que el señor de las huestes. Lothar no le prestó atención. Al igual que la conversación que mantenía Halaf con gromch.
- El mundo está sentenciado, no queda ejercito capaz de hacerle frente a los orcos.
< Malditos hijos de perra, ¿no queda nadie? ¿Dónde está la séptima legión? ¿y la falange tenebrosa? Os vais, os escondéis. Y dejáis al mundo a merced de esas bestias. Malnacidos. >
La cubierta era un hervidero. Marineros subiendo por las jarcias, desplegando velas, levando anclas. Pero Lothar seguía mirando a su ciudad. Nunca se imagino que la amase tanto. Incluso desde allí se oía el clamor del terror. Miró hacia atrás, si no fuera por los suyos le hubiese gustado claudicar en la ciudad llevándose por delante a todas las ratas orcas que pudiera y no iban a ser pocas. Luego Amapola regresó y Lothar volvió a llorar.
Pudo escuchar como uno de los enanos se mofaba de él. Se volvió hacia esa barba con patas. Siniestra sintió la excitación de Lothar estaba más que dispuesta a saltar de la vaina y cortarle la cabeza. Pero no ocurrió nada de eso. Simplemente le miró fríamente. El enano miró sus ojos negros, fríos… al maugrin le cambio la cara. Se dio la vuelta quien sabe si por miedo o por respeto.
Todo rastro de felicidad o juventud se quemaba con la ciudad.
< El precio será alto. > La frase venía repetidamente a su cabeza < ya hablaremos con el brujo>
Les dieron un camarote pero Lothar no podía dormir una tempestad de voces moribundas rebotaban en su cabeza. Los gritos, la angustia empezaban a convertirse en una amenaza que lo estaba volviendo loco. Los dejó a todos y subió a la cubierta. El sol despuntaba y de la ciudad solo se adivinaba a lo lejos una columna de humo negro.
- Adiós para siempre…
Luego se encaminó al capitán, Lord Ulfast.
- Buenos días.
- Buenas. – Fue la escueta respuesta del capitán.
- Necesito algo de ropa. Quiero quitarme este uniforme.
El capitán lo miró extrañado. No era la típica pregunta. Se imagino que quería quitarse la mugre de la batalla.
- Como mucho puedo ofreceros algún trapo de marinero, poco más.
- Suficiente.
Se quitó allí mismo la guerrera. Tenía un moratón violáceo en el pecho. Fue cuando se dio cuenta de que tenía algo roto. Se echó un cubo de agua por la cabeza. una ola de dolor recorrió el pecho del Tahúr, pero lo despreció, era como si su cuerpo quisiera sacarlo del estado de Shock en el que estaba. Un marinero a una orden de lord Ulfast le dijo que le acompañara. No tardó en regresar a la cubierta. Parecía otro marinero más. Pero se dirigió al castillo de popa. Trarbad era una leve línea o punto en el horizonte, se negaba a desaparecer como estaba haciendo.
< Maldito brujo>
Volver arriba Ir abajo
Ankalagorn
Ungoliant
Ungoliant
Ankalagorn


Cantidad de envíos : 2823
Fecha de inscripción : 27/04/2009

Corazon Oscuro (y 3). Capitulo XII Empty
MensajeTema: Re: Corazon Oscuro (y 3). Capitulo XII   Corazon Oscuro (y 3). Capitulo XII Icon_minitimeLun Nov 21, 2016 10:18 pm

Spoiler:
Volver arriba Ir abajo
https://sextopalio.forosactivos.net
kang
Gandalf el blanco
Gandalf el blanco
kang


Cantidad de envíos : 969
Fecha de inscripción : 28/04/2009

Corazon Oscuro (y 3). Capitulo XII Empty
MensajeTema: Re: Corazon Oscuro (y 3). Capitulo XII   Corazon Oscuro (y 3). Capitulo XII Icon_minitimeMar Nov 22, 2016 8:34 pm

Estaba en la cubierta del barco. El sol Se alzaba y tharbad aun ardía.
- ¿No vas a dormir?
- No puedo Tyrok. Nunca pensé que el precio fuera este. Es.. es..
Lothar no podía asumirlo se quedó mudo, sin palabras para describir el horror. Habían comprado su alma, pero el precio estaba a punto de pedir su cordura.
- Ellos o nosotros, la balanza siempre ha estado clara. – Tyrok le pasó el brazo por encima a Lothar. No le gustaba el contacto físico, pero hizo de tripas corazón e intentó mostrar eso que llaman afecto.
Lothar se derrumbó. Se abrazó a la Serpiente y empezó a llorar como un niño.
El sol ardía fulgurante mientras la ciudad dejaba de chillar y quemarse.
El viento hinchó las velas, traía un olor a cerdo quemado, a humo. La serpiente elevó el cuello, y el estomagó rugió. Al mismo tiempo el viento comenzó a ulular como un violín muy agudo. Era casi siniestro, casi bello.


Al mismo tiempo.

Pocas veces alguien le había golpeado así. Retrocedió arrastrando los pies y apretando los dientes. El brazo le ardía. Apretó aun más y empujó a Escudo de Gigantes a pesar del aguijonazo de dolor. La guardia de Brinwor se abría, como sus ojos. El mastodonte no daba crédito, nadie había podido abrirle la guardia al descargar él su mandoble. Sabía lo que venía ahora. Él lo había hecho innumerables veces. El acero no se hizo de esperar. Intentó encajar el golpe lo mejor que pudo, pero lo partió en dos. Fue rápido, indoloro, siempre pensó que su muerte sería dolorosa, pero no.

Kang tomó y miró a Bringwor. Se quitó el yelmo.
- En otras circunstancias, sin prisa, habría sido muy distinto. Eres uno de los hombres más duros a los que me he enfrentado. Lástima que no pueda ofrecerte los honores que mereces.
Se dio media vuelta y lo dejó allí y así.
Bringwor miraba desde el suelo hacia arriba. No podía moverse, no sentía nada. La figura de Kang le hablaba, pero él no le escuchaba. Su mente estaba con sus hermanos. Se iba y no podría protegerlos más.
Su mente se volvió negra. Le pareció oler a carne y su estomago rugió quemada a humo. . Al mismo tiempo el viento comenzó a ulular como un violín muy agudo. Era casi siniestro, casi bello.

Un rato largo antes...

Jegret recogió algo del suelo. Lo hizo con cuidado, no quería romperlo.

- Esto le gustará al amo. – Dijo para sí, mientras sonreía con esa dentadura podrida. – Vosotros dos, registrad esto a conciencia y tened mucho cuidado de no romper nada o de quedaros algo, os cortaré las pelotas y se las echare de comer al resto.
Los dos orcos menudos empezaron a corretear de aquí para allí. Al poco regresaron.
- No hay mucho mas salvo esto. Le enseñaron otras cosas y se quedó con unas cuantas.
- El resto para vosotros.
- Jegret podía confiar en olog y rolog y sus narices para encotrar cosas que al amo le gustasen. Su hallazgo era casi único. Decidió regresar, dejando a un lado las violaciones, las violaciones caníbales, las parrilladas humanas o las simples empalaciones de humanos en salmuera. Se hizo hueco hasta que llegó a Frank.
- Mi señor he encontrado algo que creo que os gustará.
El uruk hay se arrodilló ante el trono blanco. Como lo llamaban lo orcos. Estaba hecho a base de huesos y colmillos. Frank esperaba allí mirando un inmenso rubí.

- ¿Qué me has traído?
- Algo bonito. – El Uruk le mostró un objeto envuelto en un trapo.
AL mismo tiempo un general orco entraba por la puerta.
- Mi señor lo hemos encontrado.
- ¿Está vivo?
- No mi señor. Lo encontramos en un túnel, asesinado por unos hombres aliados con enanos. –
Los exploradores orcos Garod eran capaces de saber lo que pasaba por el olor, las huellas o los más leves indicios.- EL general estaba más que seguro.
- ¿Dónde está?
A una señal hicieron pasar dos cadáveres. Frank ordenó que le quitaran el yelmo.
Le miró la cara desfigurada. Su color era realmente malo hasta para estar muerto. Casi consumido. Con las cuencas hundidas hasta la saciedad. Lo depositó delante del trono. Estiró la mano y le tiraron la espada del Santo Padre.
- Tiene gracia que te decapite con tu espada cabrón.
La cabeza rodó y su cuello escupió un cuajarón de sangre que cayó encima del paquete de Jegret. Frank se sentó en su trono con su nueva cabeza. Luego se fijó en el paquete del Uruk. Lo abrió como un dulce tras el gran plato. Y sonrió, la madera se había teñido de un rojo intenso y vetas negras al contacto con la sangre. Con la punta ensartó la cabeza del Santo Padre que se redujo un tanto bastante. Luego empezó a tocar como de un demonio. Era una melodía rápida, aguda. . Al mismo tiempo el viento comenzó a ulular y empezó a tocar ese laud violín muy agudo. Era casi siniestro, casi bello.
Volver arriba Ir abajo
Tyrok
Noldor
Noldor
Tyrok


Cantidad de envíos : 412
Fecha de inscripción : 28/04/2009
Edad : 44

Corazon Oscuro (y 3). Capitulo XII Empty
MensajeTema: Re: Corazon Oscuro (y 3). Capitulo XII   Corazon Oscuro (y 3). Capitulo XII Icon_minitimeMar Nov 22, 2016 9:14 pm

Era ya entrada la noche y la mayoría dormía, si es que sus conciencias los dejaban tras lo que habían hecho. Tyrok decidió subir a la cubierta y deslizarse hasta la proa de aquella nave, pues las náuseas que le causaban el rítmico balancear del barco no lo dejaban dormir, y nada mejor que el aire y la brisa marina para olvidar aquel maldito mareo.

La brisa empujada por el viento humedecía su cabello, por delante, una larga distancia que recorrer, detrás quedaba un siniestro pasado, una ciudad desolada, muerte, gritos y destrucción, una traición a una ciudad y la esperanza de que entre las víctimas se encontrase él.

Elendil iba a ser el próximo objetivo de la hueste orca, pero no se podía huir para toda la eternidad, ya habíamos visto lo que parecía ser un mundo abandonado por los suyos… aunque tal vez su esperanza se encontraba en el este.

Una suculenta recompensa les esperaba de manos de Ankalagorn, pero aquel sombrío personaje que había ideado todo esto, podría estar conduciéndoles a una nueva trampa, tal vez,… lo que realmente no podíamos saber es si esa recompensa que nos iba a dar iba a servir de algo en el lejano este, lugar en el que según contaban las historias, habitaban humanos que hacían parecer educados y sociales hasta a los mismísimos orcos.

Según lo que Halaf había leído en aquel libro, varios miles de almas estarían en este momento siendo devoradas por aquel Deglutor, pero ¿qué sería peor ser devorados en muerte o ser torturados y devorados en vida? Aquello les estaría sucediendo a los pobres desgraciados que consiguiesen vivir. Pero había algo más que rondaba la cabeza de La Serpiente, si aquel orco era capaz de apreciar la gema da Lothar, ¿qué sucedería si descubriese aquel libro o cualquier otra pieza que Daverloth pudiera tener? Más nos valía estar bien lejos.

El mundo se tambaleaba, a Tyrok le parecía que por momentos podía escuchar sus quejidos de dolor al resquebrajarse, al sentir como aquellas apestosas alimañas que jamás debieron existir se adueñaban de todo y lo sembraban todo con su miseria.

Su nuevo compañero permanecía demasiado callado, tal vez estaba ideando alguna canción que dedicar a esta triste batalla, o tal vez lloraba por dentro la pérdida definitiva de aquella extraña guitarra a la que él llamaba laúd. Ya nos dijo Yandros, que nunca deben amarse a los objetos más que a las personas…

Pero bueno, pronto iba a amanecer y la comida de los enanos era deliciosa, gracias al viento y la brisa que las náuseas no triunfaron y aquel exquisito guiso de cerdo que los enanos habían preparado fue capaz de aguantar en su tripa.

Volver arriba Ir abajo
Abdulfin
Noldor
Noldor
Abdulfin


Cantidad de envíos : 427
Fecha de inscripción : 28/04/2009

Corazon Oscuro (y 3). Capitulo XII Empty
MensajeTema: Re: Corazon Oscuro (y 3). Capitulo XII   Corazon Oscuro (y 3). Capitulo XII Icon_minitimeMiér Nov 23, 2016 2:13 am

La mierda y la angustia eran las unicas cosas que salian de una boca ya torcida por el final en el que se habia embarcado, siendo este su peor puerto, Tarsil ya no sabia como sentirse, pues el habia sido partifice de toda aquella crueldad que seria recordada por la eternidad de este mundo. Lo habia olvidado todo, su laud, sus nuevos amigos, su fama, su familia, y todo por jugar a los salvadores del mundo, pues esta era su paga, todo lo contrario, todo erradicado, todo marchito y extinto.
El precio sera alto le decian las voces ... la humanidad pago el precio de uno, que para el no hubo titubeos en ordenar tal hazaña, pues para un asesino matar a tan alto cargo mundial era un buen titulo, pero eso seria si fuese asesino, pero el solo habia sido un tonto en busca de fantasia y esa fantasia se comio a la realidad.
Habia seguido a unos "sastres" sin pensar bien en los resultados de tales hazañas, una recompensa que no buscaba, pues nada debia el jilguero, sino a si mismo, y sin pensarlo mucho se habia dejado llevar por la grandeza de un asesinato, "grandeza de un asesinato", se decia a si mismo, solo unos necios seguirian pensando que todo tiene un precio por alto que sea, algunas veces hay que dejar pasar esas cosas para preservar algo, pero el que preservar, Tarsil ya habia conocido los mejores placeres del mundo vanal, y en cierta manera sabia que todo estaba mal, aunque por los caminos todavia andasen hombres y mujeres justos y nobles de corazon, pero esos ya eran menos los que habian y facilmente la fantasia se los comio.
¿Y ahora que? se preguntaba el jilguero, al oriente se dirigiria el barco cuando le tocase el momento, un barco enorme, pero Tarsil sentia como si lo estuviese deborando, mas que el barco, su propio miedo, su angustia de saber que todo lo que conocia, habia sido por el, que ahora todo seria ceniza, caos y desolacion, tanto se habia torcido su dorado sueño que no podia ni entender el porque accedio a tal plan, porque fue tan a la ligera por una gente que acababa de conocer, pero ya eso no importaba, el daño ya estaba hecho, seria su maldicion, su propia espina negra clavada en un corazon que se empezo a pudrir desde aquel dia en el que entendio que habia sentenciado al pueblo del oeste a su erradicacion.
Volver arriba Ir abajo
Haral
Gandalf el blanco
Gandalf el blanco
Haral


Cantidad de envíos : 843
Fecha de inscripción : 28/04/2009
Edad : 44

Corazon Oscuro (y 3). Capitulo XII Empty
MensajeTema: Re: Corazon Oscuro (y 3). Capitulo XII   Corazon Oscuro (y 3). Capitulo XII Icon_minitimeJue Nov 24, 2016 12:23 am

La visita en plena noche del brujo me había marcado más que lo que habíamos hecho.
Para él no éramos nada, éramos sueños. Personajes imaginarios de cualquier novela. No importaba nuestra vida o nuestra muerte, solo la historia.
Si no le importábamos a él, que no era si no otro hombre, ¿cómo le íbamos a importar a los dioses? para ellos no somos nada.
No podía parar de pensar en todo. Y entonces caí. Pensé de forma objetiva. Pensé de forma que nuestras vidas no valiesen nada, para llegar a dos conclusiones. Dos conclusiones que tenía que discutir con el Brujo cara a cara.
Aún había esperanza. Recordé a todos sus hombres. Ese enano que nos acompañaba en el barco. Ese hombre calvo que parecía invicto. El que invocaba tormentas y que el que tenía un arma rara.
Me acordé de los indagadores, de los cuatro hermanos y ése al que querían aceptaban cono uno más de los hermanos.
Al líder, Dimmu, lo llamaban el favorito de Eru. Con un grupo así, no todo estaba perdido. Casi se podría decir que esos diez hombres podrían hacer frente a todo el ejército orco.
Una esperanza empezó a crecer en mí. Necesitaba ver al Brujo nada más llegar. Aclarar solo un par de cosas que él sabría a buen seguro.
Ya lo había dicho. Este no era el fin, solo un comienzo distinto.
Volver arriba Ir abajo
Ankalagorn
Ungoliant
Ungoliant
Ankalagorn


Cantidad de envíos : 2823
Fecha de inscripción : 27/04/2009

Corazon Oscuro (y 3). Capitulo XII Empty
MensajeTema: Re: Corazon Oscuro (y 3). Capitulo XII   Corazon Oscuro (y 3). Capitulo XII Icon_minitimeJue Nov 24, 2016 9:08 am

El barco llego al puerto del Sacro Estado. Un sol ,acompañando un esplendido dia, les dio la bienvenida, ajeno a lo que estaba sucediendo en el mundo en ese momento; era la ironia de la vida, pero al fin y al cabo, a quien le preocupaba la existencia humana, si ellos mismos se habían destruido?

Les proporcionaron caballos y el resto del viaje hacia la capital lo harian sobre sus lomos. Elendil estaba aun a un par de días. Dejaron atrás el Puerto de Narsil, con mas barcos preparándose para zarpar, de los que llegaban, que era prácticamente ninguno, al igual que los que permanecían atracados en el puerto, sin ningún movimiento aparente; es decir el ajetreo en el puerto de gente loca por partir lejos de allí era constante. Habian negociaciones a pie de los barcos, disputas, peleas…todo lo que se podía uno imaginar debido al nerviosismo instaurado en la poblacion, desde la estrepitosa caída de Tharbad.

Los caminos era un constante flujo de ciudadanos que iban camino al puerto, que venían desde Elendil u otros pueblos cercanos; asi lo vieron los Sastres, los cuales pararon a descansar lo justo durante el viaje. Corria prisa por llegar a Elendil y mas después de las noticias y rumores que decían que los orcos ya habían bloqueado los caminos que iban hacia el Este, pero como tan pronto? Según decían el ejercito Orco era de muchos mas efectivos de los que llegaron a Tharbad, por lo que se creía que el resto tomo camino al Norte, hacia el Sacro Estado para que pocos o ningún humano escapase. Frank quería hacer un exterminio total y aprovecho el chivatazo de los enanos , aunque con algo de recelo, para desviar un importante numero de sus orcos hacia el Norte. Frank había pasado de tener una derrota segura a ser el completo dominador de todo el mundo conocido.El por que habían hecho aquello los enanos no lo sabia, de hecho muy pocas personas lo sabían, pero eso no le importaba.
Se cruzaron con un contingente de Inadagadores, vestidos de civiles acompañando a una vieja bruja, pero La Banda del Sastre ni se entero de ello; como mucho alguna cara les sono de su breve estancia en el Templo Oscuro. Unos pocos venían, unos muchos se iban. Las grandes puertas de la ciudad mas importante de La Tierra Media era un hervidero. La gente se amontonaba por salir y al igual que en el puerto, por negociar, para discutir, para pelear, incluso para robar. Se abrieron paso contra a contracorriente de la marea humana.
-Chico, por que no buscas oro en el trasero de mi caballo?- Dijo Angost sonriendo al chico que estaba metiendo la mano en uno de los bolsillos de la silla de su caballo. El chico se le quedo mirando sonriendo.
-Yo no…
-Vamos niño…si quieres aprender a jugar a esas cosas te puedo enseñar- Dijo Angost golpeando con la fusta de su caballo la mano del chico que mantenía cerrada, hasta que sintió el latigazo, abriéndola y tirando al aire las 3 platas que habría robado. El Principe no tuvo ni que moverse, para que las 3 monedas aterrizaran sobre su regazo.
-Eh!- Protesto el chico- Eso es mio!- Angost le enseño claramente las 3 monedas en su mano derecha. Cerro esta y la volvió a abrir, para descubrir que allí ya no había nada.
-Que es tuyo?- Dijo Angost- Yo no veo nada. Alguien ha visto algo?- Pregunto a sus amigos- todos negaron con la cabeza. -Abrio la mano izquierda ahora y habían 3 monedas, pero esta vez de oro. Se las lanzo al chico, el cual estaba con la boca abierta.- Vete de aquí, anda!- Le dijo Angost con gesto serio- YA!- El chico salio corriendo con la cara palida- Pero vete de la ciudad!... idiota…-Angost rio…para el Principe hasta el fin del mundo era una broma.

La llegada al Templo de Los Indagadores fue al atardecer. No se esperaban lo que se encontraron. Un contingente de solados estaban en el patio de armas, pero no pudieron llegar hasta mas alla. Unos soldados les cerraron el paso.
- Alto! No se puede pasar.
Los Sastres miraron con desconcierto.
-Buenos días caballeros, Se puede saber que ocurre?- Pregunto Angost.
-No sabeis que ocurre?
-Por eso pregunto – Angost sonrio.
-Cabo- Dijo uno de los soldados. El soldado que hablaba con Angost se giro-Preguntele de donde son?
-Ya, ya lo se- Dijo el cabo de mala manera- De donde sois y a que venis?
Angost dudo si decirle de donde venían, pero finalmente lo hizo.
-De Tharbad. Hemos escapado del ataque orco por el mar.
-Por todos los dioses!- Dijo el cabo- Puede ser?! Acompañadme. Dejad los caballos aquí.
El Cabo Fredson los acompaño hasta Lord Steiner. Parecian tener sitiada la torre del Templo. Sobre la única puerta visible de esta se veian algunos arañazos, pero nada importante. Parecia que los intentos de echarla abajo habían terminado en fracaso. La Banda del sastre hizo una reverencia tanto a Steiner como a Siete, que eran los que tenían el mando en ese sitio.
Tras los saludos Steiner fue directo al grano: - Me ha dicho Fredson que venis de Tharbad… Sois los Sastres?
-Asi es.-Dijo Angost extrañado- Que pasa?

Steiner conto todo lo que había pasado con Ankalagorn hasta el momento, visiblemente afectado. –Einer estaba en sus aposentos, de este mismo Templo. Mis soldados lo encontraron, en su cama, lo había colocado ahi. Llevaba varios días muerto- La voz de Steiner se quebró. Tomo aire para continuar- Luego se encerro en esa torre. Sabria que vendríamos a por el. Intentamos entrar, pero es imposible, llevamos 2 dias intentandolo. Lo ultimo que deseamos es traer maquinas de asedio, primero porque es solo un hombre y segundo porque queremos cogerlo vivo para que sea juzgado y ajusticiado, Dimmu lo habría querido asi. La cuestión es que cuando llegamos a su puerta había una nota en ella- Siete les tendio un pergamino, la caligrafia era perfecta pero visiblemente temblorosa y manchada de sangre:
“ Solo dejare que entren los Sastres que vienen de Tharbad.” Luego venían escritas unas reglas muy claras y concisas de los pasos a realizar cuando abriese la puerta, como que solo podían estar los Sastres cerca de la puerta etc.
“Despues de hablar con ellos, saldrán. La puerta la dejaran abierta y podréis a entrar a por mi. NO OFRECERE RESISTENCIA.
Firma: Thresser “Ankalagorn” hijo de Varusser, Sumo Maestro de los Indagadores de la Oscuridad”.

-Nos ayudareis? Que teneis que hablar con el? Por que os espera?que quiere de vosotros? Decidnos todo lo que sepáis-
Volver arriba Ir abajo
https://sextopalio.forosactivos.net
Ankalagorn
Ungoliant
Ungoliant
Ankalagorn


Cantidad de envíos : 2823
Fecha de inscripción : 27/04/2009

Corazon Oscuro (y 3). Capitulo XII Empty
MensajeTema: Re: Corazon Oscuro (y 3). Capitulo XII   Corazon Oscuro (y 3). Capitulo XII Icon_minitimeVie Nov 25, 2016 9:42 am


Steiner y Siete accedieron. Era la única solución si querían obtener algo en claro de aquello, además, los llamados sastres parecían no mentir.
Los soldados se apartaron y dejaron solo a los sastres. Hasta que los soldados no estuvieron a la distancia escrita en el pergamino la puerta no se abrió. Los Sastres comenzaron a entrar. Una voz gritona y algo aguda – Deeprisa!! Entrad deprisa! –Obedecieron .Al girarse vieron al ser mas feo que podían imaginarse. Media cerca de 2 metros y su cuerpo estaba cubierto por numerosos cuernos. Su cabeza era coronada por 4 de ellos, enormes. Con grandes colmillos y 5 ojos rasgados de color amarillo. Angost ya lo había visto una vez, hablando en las sombras con El Brujo, pero aun asi no pudo evitar estremecerse, como los demás. La criatura echo el pesado tranco de un material oscuro y extraño, que emanaba una energía propia, desagradablemente negativa, malsana u oscura, seguidamente giro una rueda y un poderoso mecanismo se escucho en su interior.
-Buenas noches- Dijo Angost, que era educado hasta con un demonio del Sexto Palio. –Llevanos ante tu señor.
-Seguidme- Dijo la bestia que llamaban Ephmehret. Atravesaron una puerta. La presencia del Brujo no se hizo esperar, pues estaba en la sala contigua… pero no estaba solo.
Era una sala bastante grande para estar dentro de una torre. Había una mesa, con comodas sillas, pero el Brujo estaba sentado en el primer escalon de unas escaleras que subían al primer piso, seguramente. Lo que mas impresiono no fue eso, ni que fuera sin armadura, ni su extraña espada a sus pies que parecía brillar con vida propia( un brillo apagado y oscuro, a la vez que luminoso, algo imposible de explicar) ,ni su hombro partido, sin curar, lleno de sangre reseca; ni su aspecto abatido y gris… febril; sino el enorme demonio que estaba a su lado, de pie , armado con un gran hacha de doble hoja, en la que se apoyaba, encarado a los Sastres , con rostro imperturbable, escoltando a su Señor. Los sastres miraron instintivamente a sus espaldas, Ephmehret cerraba la salida de la sala, de manera imponente, con sus grandes garras…no necesitaba mas armas. Si ese horrendo rostro pudiera sonreir, sin duda lo estaría haciendo de manera cruel, incluso sadica, disfrutando del momento de miedo puro, que causaba en esos insignificantes humanos.

-Por fin habéis llegado.No me quedaba mucha fuerza ya. Encontrareis lo prometido sobre la mesa, en esa mochila- Dijo con voz cansada el Brujo- Pense si esperaros o no, pero cai en que posiblemente tendríais alguna pregunta o preguntas que hacer, por lo que decidi esperar.Comprendo vuestra confusión, es lógica…hasta el mismísimo Abigor en este momento esta confuso. No sabe que esta pasando- Ankalagorn sonrio. Una sonrisa oscura y terrible, casi demoniaca.

Es vuestro turno… Hablad, pero daos prisa, no os andéis por las ramas con preguntas frívolas -Y añadió enigmáticamente- ahora el tiempo vuelve a contar.
Volver arriba Ir abajo
https://sextopalio.forosactivos.net
Ankalagorn
Ungoliant
Ungoliant
Ankalagorn


Cantidad de envíos : 2823
Fecha de inscripción : 27/04/2009

Corazon Oscuro (y 3). Capitulo XII Empty
MensajeTema: Re: Corazon Oscuro (y 3). Capitulo XII   Corazon Oscuro (y 3). Capitulo XII Icon_minitimeLun Nov 28, 2016 11:07 am

-Podemos ayudarte en algo? Te entregaras?- Pregunto Halaf, aunque conocía de sobra la respuesta.
Mordrov levanto el hacha, miro a la Banda del Sastre, con algo parecido a una sonrisa, después miro a su Amo. Ankalagorn estaba sonriendo, tambien.
-Que empiece la batalla!- Dijo ankalagorn con fuerza renovada
-Mi Señor Gothmorg- Dijo Mordrov con su grave y raspada voz- Acoge el alma de Thresser hijo de Varusser en tu poderoso abrazo!-Halaf dio un paso estirando la mano intentando detenerlo, pero el demonio hizo caso omiso. Mordrov dejo caer el hacha con furia, decapitando al Señor de las Huestes. El cuerpo sin cabeza cayo al piso, mientras Mordrov y Ephmheret se esfumaban en un humo negro y apestando a azufre, asi como el arma siniestra y extraña del Brujo. El Hacha del Mordrov, sin embargo, se quedo un instante en el aire, luego cayo y golpeo con dureza contra el suelo retumbando en toda la sala. Luego, todo se quedo en silencio.

-Ahora que diremos al salir?! Que el mismo se ha cortado la cabeza?!- Lothar estaba bastante nervioso- Este es el culmen de su plan… Nos ha jodido bien!
-Tranquilos…-Dijo Halaf.- Busquemos en la mesa y en el resto del lugar- Dijo señalando la mochila que había sobre la mesa.

Dentro había una buena cantida de oro, próxima o superior a las 1000 mil piezas. No eran monedas, por lo que podrían venderlo. Habia también un mapa, era un mapa que nunca habían visto, que detallaba muy bien las tierras del Este. Todo era mas grande de lo que podrían esperar; Angost no pudo reprimir una sensación de excitación ante el mundo que se le abria ante sus ojos. Con el mapa había una nota que decía: IMORTANTE: Olvidad el barco en el que habéis venido. Seguramente habrá partido ya, ante el peligro de invasión de personas, si es que no lo han hundido ya.En su lugar Id a este lugar.-Habia un minimapa, con un camino trazado- Encontrareis un barco pescador . Pagad al hombre , llamado Märtin, con 200 piezas de oro . El os llevara al Este.
Tambien encontraron una nota firmada por Ankalagorn. En ella exculpaba de toda culpa de su muerte a los Sastres, asi como su ultima voluntad de entregar sus enseres a los Sastres. En ella decía, también que el motivo de su llamada había sido porque tras la misión que realizaron en Tharbad, había sentido una identificación y aprecio especial por ellos, y como ya no le quedaba nada en el mundo había querido despedirse de ellos. Luego había una emotiva carta dedicada a Dimmu y a los otros 2 hermanos, pero en especial al primero, que no servia de mucho, o de nada.

En los pisos de mas arriba encontraron al General Kang. Su cuerpo sin vida reposaba en un catre, su cara era extrañamente de paz, se podía decir que de felicidad.

En otra habitación encontraron la armadura de Ankalagorn, perfectamente colocada y limpia. Cerca de ella un precioso arco de madera, compuesta.
Su enorme escudo, que llamaban el Muro de gigantes.
Su capa colocada sobre su armadura.
Un mandoble, también de bella y perfecta fabricación.
Y una minitienda de Campaña…o eso al menos parecía.
Misteriosamente Kang no había dejado nada.
Volver arriba Ir abajo
https://sextopalio.forosactivos.net
Ankalagorn
Ungoliant
Ungoliant
Ankalagorn


Cantidad de envíos : 2823
Fecha de inscripción : 27/04/2009

Corazon Oscuro (y 3). Capitulo XII Empty
MensajeTema: Re: Corazon Oscuro (y 3). Capitulo XII   Corazon Oscuro (y 3). Capitulo XII Icon_minitimeLun Nov 28, 2016 11:09 am

mAPA ESTE
Corazon Oscuro (y 3). Capitulo XII Mapazo10
Volver arriba Ir abajo
https://sextopalio.forosactivos.net
kang
Gandalf el blanco
Gandalf el blanco
kang


Cantidad de envíos : 969
Fecha de inscripción : 28/04/2009

Corazon Oscuro (y 3). Capitulo XII Empty
MensajeTema: Re: Corazon Oscuro (y 3). Capitulo XII   Corazon Oscuro (y 3). Capitulo XII Icon_minitimeLun Nov 28, 2016 9:39 pm

Si pensaba que ya lo había visto todo, se equivocó.
< Joder se ha cortado la cabeza, ¡hijo de perra!>
Lothar tardó un rato en asimilar la escena.
< Esta completamente ido. Hemos servido a este loco ciegamente, ¿Quién es el loco? >
Empezaba a dudar si realmente habían salvado su alma. Si, el libro les contó todo aquello, pero en la mente criminal de Lothar se fraguaba la idea de que todo aquello no fuera un truco para matar al Santo Padre y condenar a la humanidad.
< Pero se ha cortado la cabeza>
Todo empezaba a superarlo. En su cabeza no entraba el suicidio.
< al diablo con el diablo>
Se acercó a Ankalagor. Se agachó y cogió su cabeza. La agarró del pelo por la nuca. La levantó hasta quedar a la altura de los ojos.
La muerte empezó a desfigurar el rostro, aún así parecía… complacido.
< Eres un bastardo hijo de perra.>
Dejó su cabeza en la mesa.
Se repartieron el testamento. No quería nada. No del brujo.
Registraron el lugar. Estaba limpio.
Lothar se acercó al fuego de la chimenea. Y se sentó. Miraba las llamas.
- Despierta. No todo está perdido.
- Si, aun nos tenemos los unos a los otros ¿no Halaf?
- Si. Y para que veas que esto no es mas que otro principio tengo un regalo para ti.
Lothar enarcó una ceja. El rubio abrió su petate. Sacó un par de bultos, uno se lo lanzó a Angost y el otro se lo dio a Lothar.
- Alegra esa cara. Este es el comienzo de un nuevo futuro.
Lothar abrió el paquete. Su chaqueta de Antelina repujada en plata apareció bien doblada. Debajo de ellos unos pantalones de cuero de Minas Tirih verde oscuro salieron a relucir.
-¿y esto? Lothar no daba crédito.
- vi que cara pusiste cuando dejaste la chaqueta y te pusiste el uniforme. Sé que la hizo el Zurdo y lo mucho que te gusta. No podías llevar nada. Así que hice hueco en el petate y os traje ropa digna. Creo que es buen momento para alegrarte el día.

< Ahora sí> Lothar se caló bien la chaqueta. Se sintió renovado. < No hay nada como ir bien vestido cuando la cosa pinta fea> Los pantalones no se hicieron de rogar. Se ciñó bien el cinto y agarró a Siniestra dándole una suave caricia hasta cogerla con fuerza.

- Vámonos. El este nos espera.

Respiró hondo y sintió otra punzada de dolor. Le ardía el pecho, a pesar del vendaje y las hiervas que le pusieron en el barco. Pero apretó los dientes y mostró un aire fuerte, decidido.

Aunque tenía muy claro que estaba totalmente perdido…
Volver arriba Ir abajo
 
Corazon Oscuro (y 3). Capitulo XII
Volver arriba 
Página 1 de 1.
 Temas similares
-
» Corazon Oscuro. Capitulo 7
» Corazon Oscuro (2). Capitulo X
» El corazon de la Dama. Capitulo V
» La Horca. Capitulo I
» Blesser (Aprendiz de paladin oscuro)

Permisos de este foro:No puedes responder a temas en este foro.
Bienvenidos a la 6ª Edad de los hombres :: AVENTURAS :: La Mano y la Sombra-
Cambiar a: