Diario de un Elfo

1 de junio
He decidido empezar un diario. No sé a cuento de qué, pero necesito volcar algo de mis pensamientos en algún sitio.
Llevo unas cuantas noches soñando con frases en quenÿa. Tengo que refrescar esta lengua. Desde que era un adolescente no la había vuelto a usarla. Qué lejos quedan ahora esos tiempos. Aunque no me arrepiento, echo de menos a mis padres. La vida del juglar me llamaba, tenía la mejor voz que nadie había escuchado nunca y quería ver mundo, conocer sus maravillas. Que ingenuo era. Te echo de menos Padre.

3 de junio
Hoy he despertado igual que ayer y anteayer, ya no recuerdo cuando fue la última vez que no sueñe con lo mismo. Se ha estado repitiendo noche tras noche desde hace un mes. Al final lo he escrito. Las palabras escritas en rojo fuego se repiten constantemente. Una tras otra se van apareciendo ardiendo de la nada y consumiéndose igualmente.
Este nuevo papel del Teo tiene una textura muy agradable, las letras circulan como una cuchilla sobre el hielo. Me ha resultado muy agradable escribir en qüenya, las palabras fluían solas en los dedos, sin que tuviera que pensarlas.

5 de junio
Turgoll ha convocado a la banda. El hurón tiene un trabajo en el puerto. Parece que hay sabotear el cargamento de armamento de un carguero que tiene como destino Minas Tirirh. Hay trabajos que no entiendo. Pero no soy yo quien va a discutir las órdenes. El imperio Haradaico necesita de toda la ayuda posible. Son ellos los que están conteniendo a las huestes orcas. Supongo que esto no era lo que quería escribir, pero me da rabia este tipo de trabajos.
Desde que escribí el sueño han pasado cosas extrañas, no se ha vuelto a repetir, ese en concreto no. Ahora sueño con otro, creo que están relacionadas. Voy a escribir todos los sueños. Me da en la nariz que esto va a ser una buena historia. Sin embargo solo veo las palabras en mis sueños. Son llamas que se forjan en la nada creando las palabras. Al despertar escribo todo lo que he visto, pero nada más escribirlo lo olvido todo.

9 de junio
El trabajo del puerto ha ido como la seda. Hoy he cambiado las cerraduras, creo que alguien ha estado en mi casa mientras he estado fuera, en el trabajo del barco. La próxima vez se va a encontrar una sorpresa. Aunque ha sido muy hábil no ha conseguido que me no dé cuenta, hay alguna pista suelta, muy sutil, pero la he descubierto.

12 de junio

No consigo encontrar el primer sueño que escribí y lo peor de todo es que no lo recuerdo. Tengo la sensación de que he perdido lo más importante de todo.
No lo entiendo, desde que cambié las cerraduras nadie ha vuelto a entrar nadie, de eso estoy seguro. También han desaparecido una daga y un amuleto. Son objetos de valor de otros golpes.

15 de junio
Media ciudad ha ardido. Los llantos se perdían en el crepitar del fuego. Era un mar virulento de fuego sacado del mismo infierno. Las palabras se quedan cortas para describir ese horror. Ni siquiera la cara contraída de los supervivientes que han dejado atrás a sus seres queridos sirve para evocar como el infierno se abrió paso en la ciudad. Hoy he llorado como había tiempo no lo había hecho.


20 junio

La historia me tiene muy intrigado. Como si de una obra de teatro o u cuento se tratase, cada noche sueño con un nuevo episodio de esta epopeya. Me gustaría hablar más de ella aquí pero solo me siento seguro escribiéndola en élfico. Qué buena idea acabo de tener, voy a traducirla al idioma común y adaptarla para el teatro. Será una obra de teatro maravillosa. Pero es muy extraño que solo sueñe con las palabras. Sería maravilloso poder ver el sueño, no solo leerlo, que raros son los sueños.



16 de julio

Esto es una maldición, al pasar del qüenya al idioma común se compone una rima perfecta, elegante y culta. Que curiosamente estuvo de moda hace veinte años y a pesar de su exquisita métrica y musicalidad, terminaba siendo aburrida. El público terminó rechazándola por eso. Nadie aguantaba tal verborrea. He tratado de cambiarla y darle un ritmo mas actual, pero es imposible sin respetar el alma de la obra… Lo peor, No puedo dejar de escribir…

20 De julio

Turgoll ha vuelto a convocar a la banda. Quiere información. Algo se cuece en el torneo de cetrería de la ciudad. Bueno, siempre se cuece algo en estas fechas.
Cambiando de tema creo que me han seguido esta noche. Mañana averiguaré que pasa. A veces me gustaría ser solo un bardo.


25 De julio

Tendí una trampa y la ratita cayó. La tengo aquí colgada pero se niega a hablar.
La verdad es que odio que no me contesten. Me obligan a hacer cosas desagradables. No se dan cuenta de que es más sencillo claudicar.
Lo he dejado para dedicarme a mi pasión. Es curioso decir esto, pero nunca pensé que nada pudiera sustituir a la música pero mírame, como loco por coger la pluma. A veces me da la sensación de que el laúd me mira con celos cuando cojo la pluma.

30 de julio
Al final no ha dicho nada la ratita. Hay que honrar su valor y lealtad, aunque sea con estas míseras palabras.
Hoy es un día de decepciones. Tal y como me temía nada más echarle un vistazo Duncan ha rechazado mi libreto. Use mi mejor letra para ese manuscrito. Qué lástima. Pero claro, esa rima vieja y aburrida no interesa al público. La historia en sí, estaba bien, lástima que el relato terminara sonando como un interminable compendio de detalles. Intenté cambiar la métrica y rima, pero me resultó imposible. Creo que esto ha sido una pérdida de tiempo, pero, o terminaba con el libreto o él terminaba conmigo. Ahora creo que puedo descansar.


4 de agosto
Creía que los sueños habían terminado pero no. Ahora no sueño con palabras. Ahora son como cualquier sueño. Veo un palacio blanco, alto y ligero, rodeado por el meandro de un rio. La niebla lo envuelve todo dejando ver ese palacio entre girones. Estoy deseando dormir a ver cómo se desarrolla todo

Turgoll está preparando un golpe. Quiere darlo en el barrio prestamista. El viejo hurón se está volviendo loco. La Mano nunca opera en ese distrito. Algo raro se cuece. Creo que he escrito demasiado en este libro, voy a tener que esconderlo bien o destruirlo. Aunque me da pena, me cuesta mucho sacar tiempo para dedicárselo a la pluma, como para quemarlo.


15 de Agosto.

Turgoll ha cambiado de planes. Ese golpe no se va a dar, la Mano ha cambiado de planes. Tenemos un encargo en Nueva Gondor. Con la tapadera de juglar viajaré a la capital del reino. Viajaré solo y la Misión es del todo arriesgada, he de matar al embajador del imperio haradaico e incriminar al embajador de la ciudad estado de Umbar.

Los sueños han avanzado mucho…

Era de noche cuando sucede todo. La niebla envolvió la ciudad y Tharbad desapareció del mundo. El nuevo castillo del rey de Tharbad estaba de gala, el primogénito del rey cumplía un año. Toda la corte menos uno rendía pleitesía al delfín.
Nada presagiaba lo que iba a ocurrir. El desastre y la maldición estaban a punto de hacer acto de presencia. La destrucción de la casa de Tharbad…




25 de Agosto

El viaje está siendo aburrido. No me gusta mucho navegar corriente arriba, bueno tampoco corriente abajo. Al fin hemos llegado a puerto. El resto del camino tierra firme. Por fin.


10 de septiembre.

Se ha terminado el sueño. Es horrible. Lo que en un principio parecía una odisea, el comienzo de una gran aventura, se ha convertido en una historia macabra.
Un terror se abalanzó sobre el nuevo palacio devorándolo todo a su paso. La niebla lo envolvió todo, dejando este crimen impune. El hundimiento tendría la culpa dejando al culpable indemne.

Creo que me estoy volviendo loco. Pero tengo la certeza de que el sueño es real.
Mañana se decidirán muchas cosas.

11 de septiembre

He fingido ser un mensajero. He dejado el manuscrito completo en una orden, no la obra de teatro que escribí para Duncan, les he dejado el nuevo manuscrito con el nuevo sueño. Ellos se encargarán de resolver este entuerto. Les he dicho que el paquete viene de parte de Duncan. He soñado con él. Es la persona que desencadenará todo.
Esperaba más preguntas, al final ha parecido un mero trámite. Ese monje altanero me ha despachado demasiado pronto. ¿Irá a buen puerto todo esto?


12 de diciembre.
Hacía mucho que no escribía en este diario. Desde el episodio de Elendil los sueños me habían abandonado, hasta ahora. En este nuevo sueño veo un camino que empieza en el templo orco. Avanza siguiendo unas extrañas marcas. Una puerta y una llave enterrada. Tras ella. Un pasillo que da a otra puerta que esconde un tesoro tan grande como el horror que lo guarda.
Luego el sueño cambia, un laúd se quiebra mientras una aguja y su hilo repasan una máscara que se come un guante blanco…

Ahora que lo pienso, no sé si los monjes saben leer qüenya…